La Ley de la Pandemia queda otra vez sin votarse antes de que venza el DNU
Traba. En el massismo aseguran que ya tienen los votos y buscarán tratarla el martes. La oposición desmiente.
Entre la resistencia de la oposición, la demora en la renovación del protocolo virtual y la negociación para conseguir los números, Diputados ya no llega a tratar la Ley de la Pandemia pedida por Alberto Fernández antes del viernes en que vence el Decreto de Necesidad y Urgencia de restricciones a la actividad que estableció el Gobierno por el COVID. Pero en el Frente de Todos ahora aseguran que tienen los votos y apuestan a tratar el martes que viene la ley que establece los parámetros para abrir o cerrar actividades por la pandemia sin apelar a los DNU.
Dispuesto a dejar de pagar el costo político de cada medida por decreto -y también los problemas que tuvieron algunas de esas medidas en su paso por los tribunales-, el Presidente buscaba que la ley, con parámetros sanitarios, las automatizara en todo el país. La ley fue aprobada rápidamente en mayo, y con modificaciones, en el Senado, donde el FdT tiene mayoría propia. Pero en Diputados, la iniciativa se estancó.
El Gobierno insistió. "Tenemos expectativas de que se trate esta semana y que logre la sanción", declaró el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, esta semana en Página 12. Pero eso no ocurrirá, según surge de u conteo de los votos con los que cuenta el Gobierno para convertir el proyecto en ley.
La semana pasada no hubo sesión porque el titular de la Cámara baja, Sergio Massa , estuvo de gira por Estados Unidos. El lunes fue feriado y este miércoles vence el protocolo de funcionamiento virtual necesario para sesionar en la Cámara de Diputados.
Juntos por el Cambio todavía no firmó el nuevo protocolo que permite apartarse del reglamento y hacer que las sesiones se puedan hacer con algunos diputados conectados de manera remota y si bien el oficialismo asegura que sin su firma igualmente se puede convocar a una sesión, se espera que haya una reunión de jefes de bloque, esta tarde, con Massa para destrabarlo sin fuego mediático y negociar los temas que vienen.
La postura más dura de ese interbloque la tiene el PRO que pide 100% presencialidad (estaban elaborando un listado de cuántos diputados vacunados ya hay) y su jefe Cristian Ritondo asegura que no va a firmarlo si no es a temario cerrado. Es decir, si el Frente de Todos no confirma qué proyectos quiere votar.
Ese temor lo comparten los otros opositores que no quieren que se trate, principalmente, el Ministerio Público Fiscal y tampoco la Ley Pandemia, a la que catalogan de "inconstituDespués cional". Como ambas tienen dictamen, están listas para ir al recinto.
"La firma para su renovación empezó a circular el fin de semana. Todos menos JxC que apostó a dejar vencer el protocolo para no sesionar", señalaron desde el Frente de Todos. "Nadie del oficialismo no contactó para consensuar la renovación como se hizo siempre", retrucan en Juntos por el Cambio.
Lo cierto es que con o sin protocolo consensuado, los tiempos ya no dan para convocar a una sesión el jueves ni viernes porque los legisladores y trabajadores que entran al recinto empiezan a hacerse dos días antes los test de PCR. Y los legisladores tampoco fueron alertados para viajar.
"Ya tenemos los votos", aseguran cerca de Massa y apuntan a que haya sesión el martes que viene.
Con el rechazo del lavagnismo, de los cuatro cordobeses que responden al gobernador Juan Schiaretti y de la neuquina Alma Sapag (MPN), la cuenta es muy ajustada para conseguir la aprobación.
Incluso sectores del oficialismo la daban por sepultada con satisfacción. Es que muchos gobernadores del propio Frente de Todos prefieren que no se apruebe. En las últimas semanas, con los criterios que establece la ley muchos distritos tendrían que haber cerrado actividades que estuvieron abiertas estos días. ■