Por una abrumadra mayoría, la ONU volvió a condenar el embargo a Cuba
Hubo 184 votos a favor de la condena. Sólo EE.UU., autor del bloqueo, e Israel votaron en contra.
La Asamblea General de la ONU condenó ayer jueves por 29ª vez el embargo estadounidense impuesto a Cuba hace casi 60 años, y lo hizo por una brumadora mayoría de 184 votos a favor contra dos, los de Estados Unidos e Israel.
Hubo tres abstenciones: Ucrania, Emiratos Árabes Unidos y por segunda vez Colombia, otro gran aliado de Washington. El gobierno brasileño de Jair Bolsonaro, que se opuso por primera vez a la resolución en la última votación de 2019, cuando el presidente republicano Donald Trump aún estaba en la Casa Blanca, no votó en esta oportunidad. El año pasado se había suspendido esta votación debido a la pandemia de coronavirus.
“Como el virus, el bloqueo asfixia y mata y debe cesar. ¡Patria o muerte! ¡Venceremos!", dijo el canciller cubano, Bruno Rodríguez Padilla, al culminar un discurso presencial en la Asamblea General. El embargo estadounidense, impuesto a La Habana hace 59 años y endurecido en varias oportunidades, no ha logrado derribar el gobierno del Partido Comunista cubano.
El canciller cubano indicó que desde que el presidente John F. Kennedy impuso el embargo a Cuba en febrero de 1962, en plena Guerra Fría, menos de un año después de que Fidel Castro declarase el carácter socialista de la revolución, ha provocado perjuicios a la isla por 147.853 millones de dólares a precios corrientes.
"El daño humano del bloqueo es incalculable. La vida de ninguna familia cubana escapa de esta política", lamentó.
Estados Unidos defendió en la Asamblea las sanciones contra Cuba como una manera de “hacer avanzar la democracia, promover el respeto de los derechos humanos y ayudar al pueblo cubano a ejercer sus libertades fundamentales”.
“Los cubanos, como todas las personas, merecen el derecho a libertad de expresión, reunión, cultura", dijo el coordinador político de la misión estadounidense ante la ONU, Rodney Hunter. "Ningún gobierno debe silenciar a sus críticos mediante violaciones de sus derechos humanos. Estados Unidos se opone a esta resolución”, agregó.
El embargo a Cuba fue aprobado por ley y sólo el Congreso estadounidense puede ponerle fin. Una sola vez, en 2016, Washington se abstuvo de votar en contra de la resolución cubana de condena al embargo, en un contexto de acercamiento del gobierno de Barack Obama hacia la isla. Las relaciones entre ambos países fueron restablecidas en 2015.
Pero Donald Trump dio marcha atrás a ese histórico acercamiento y volvió a declarar al país comunista como estado patrocinador del terrorismo e impuso cerca de 250 nuevas sanciones contra Cuba.
Las medidas provocaron una grave crisis de energía y combustible, restringieron los viajes de turistas estadounidenses a la isla y el envío de remesas de cubano-estadounidenses a sus familiares en Cuba, un ingreso central para muchos.