La gente está menos feliz que en 2020 y casi la mitad no se siente satisfecha
Una encuesta midió el bienestar emocional de los argentinos. Y, pese a lo que se podía suponer, este segundo año de pandemia está impactando más que el primero.
Si vivís en Argentina, tenés entre 30 y 40 años, sos hombre y residís en Tucumán, estás en lo más alto de lo que sería una suerte de índice federal de “infelicidad Covid”. Pero si no pertenecés al grupo anterior tampoco estás en tu lugar feliz.
Una nueva medición del Observatorio de Tendencias Sociales y Empresariales de la Universidad Siglo 21 a la que accedió en exclusiva Clarín muestra, que tras 15 meses de pandemia y pese a que 2021 apostaba a ser el año que dejaría atrás el flagelo emocional de 2020, casi la mitad de las y los argentinos aseguran no ser felices ni estar satisfechos con su vida.
Los niveles de felicidad y satisfacción cayeron de un 63% a un 57%. La comparación es anual, entre mayojunio de 2020 y mayo-junio de 2021, y marca el impacto de los últimos meses en el bienestar emocional.
Además, por tercer año consecutivo se registró un aumento en los niveles de estrés crónico y agotamiento psíquico de la población.
¿Por qué estamos ahora más infelices e insatisfechos con el desarrollo personal que en 2020? ¿No se supone que antes fue peor porque el virus nos tomó por sorpresa, que este año hay cierto “acostumbramiento” y además ya tenemos la vacuna?
La respuesta -las conclusiones de estas 1.050 encuestas a personas de entre 18 y 65 años, que trabajan y viven en la Capital, Córdoba, Corrientes, Mendoza, Rosario y Tucumán- es más compleja. Y no es simplemente un termómetro del estado de ánimo.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), se entiende a la felicidad como el estado de bienestar y satisfacción con la vida. Actualmente, en algunos países se mide porque es un predictor del desarrollo óptimo de sus habitantes.
¿Cuál fue el modelo científico utilizado para medir felicidad en Argentina? Las innovaciones que surgen en la llamada Psicología Positiva, que considera que el bienestar emocional está conformado por cinco predictores psicológicos: las emociones positivas; las relaciones sociales; la motivación; la percepción de propósito y la percepción de logro. Hay subas y bajas en cada dimensión. Pero, en la sumatoria, el nivel de felicidad no redondea para arriba en el país.
Según datos arrojados por la investigación, sólo el 40% de la población señala sentirse alegre y satisfecha. Aunque casi la mitad, el 48%, se siente entusiasmada e interesada en que eso suceda. En la dimensión de las relaciones sociales, se observaron los puntajes más altos: el 72,6% “se siente querido o amado”, el 66,6% manifiesta que está “satisfecho con sus relaciones personales”. Y el 60% dice que su vida tiene un propósito.
Pero el dato que nubla los anteriores predictores de felicidad es que menos de la mitad de los argentinos, el 45%, siente que alcanzó metas importantes en su vida.
Martín Etchevers, a cargo del Observatorio de Psicología Social Aplicada de la Facultad de Psicología de la UBA, recuerda los últimos datos sobre bienestar según un estudio de secuelas Covid publicado en mayo.
“Más del 45% reportó ansiedad, entre moderada y severa, después del alta epidemiológica. Más del 56% percibió síntomas compatibles con depresión clínica (diagnosticada). Casi un 40% cambió su tendencia a pensar en la muerte y/o en el suicidio. El 64,4% reportó fallas cognitivas (entre leves, moderadas y severas). Un 46,3% dijo que su atención empeoró. Y el 43,1% reportó que su memoria también empeoró a partir de haberse infectado”, enumera.
Según estos datos, parece que con el acostumbramiento no alcanza. “Hay momentos de tensión, normales, que uno resuelve. Pero nosotros hace más de un año que estamos en tensión. Como cualquier organismo en tensión, se termina agotado si no se resuelve. Eso se llama Síndrome General de Adaptación. Pasa en todo el mundo. Lo más probable es que la próxima pandemia sea un problema de salud mental”, advierte Carlos Spontón, psicólogo, investigador y director del Observatorio que llevó a cabo esta investigación.
Las mujeres presentaron mayores niveles de alta motivación (49,2%) y logros (75,7%) que los hombres. Y quienes tienen entre 41 y 51 años se sienten más positivos (53,6%), queridos y amados (80,6%) y sienten que lo que hacen en la vida es valioso y vale la pena (71,4%), frente a los de entre 30 y 40, que no alcanzan ni el 50% de los estados de ánimo anteriores.