Tres de cada diez pacientes internados con Covid tienen problemas renales
Además, se incrementó en un 70% la demanda de diálisis en las unidades de terapia intensiva.
A medida que la pandemia del Covid avanza, los investigadores encuentran más consecuencias provocadas por el coronavirus, especialmente en pacientes con comorbilidades, de riesgo por su edad avanzada o en personas internadas con asistencia mecánica de oxígeno. Ahora, un nuevo informe de la Sociedad Argentina de Nefrología alerta sobre los efectos del Covid en los riñones.
Según la entidad, tres de cada diez pacientes internados con Covid presentan problemas renales, al mismo tiempo que se registra un notable aumento en la demanda de diálisis en las terapias intensivas.
El estudio destaca que las posibles causas por las cuales el Covid-19 afecta los riñones incluyen, entre otras, la unión del virus con el receptor de la enzima convertidora de angiotensina tipo 2 del riñón, fenómenos de trombosis a nivel renal, una inflamación sistémica que afecta especialmente los riñones, así como el deterioro renal propio de una persona muy comprometida, en el caso de los pacientes internados en unidades de cuidados críticos.
Estas lesiones denotan un abanico que va de leves-moderadas a severas, llevando estas últimas a la insuficiencia renal. Justamente la insuficiencia renal aguda severa con requerimiento de diálisis de urgencia se ve particularmente en los pacientes críticos y, en especial, en aquellos que requieren de ventilación mecánica.
En un estudio realizado en Nueva York, sobre 5.449 pacientes ingresados con Covid-19, el 36,6 por ciento desarrollaron insuficiencia renal aguda (IRA). El 46,5 por ciento tuvo IRA leve, el 22,4 por ciento moderada y el 31,1 por ciento, severa. De estos, el 14,3 por ciento requirió tratamiento de sustitución renal (diálisis en agudo). Por otra parte, el 89,7 por ciento de los pacientes que requirieron respiración mecánica desarrollaron IRA, en comparación con el 21,7 por ciento de los pacientes sin respirador. Y casi la totalidad (96,8 por ciento) de los pacientes que requirieron diálisis estaban con respirador.
Entre los pacientes con IRA, al terminar el estudio había fallecido el 35 por ciento, el 26 por ciento había sido dado de alta y el 39 por ciento aún estaba hospitalizado. El desarrollo de insuficiencia renal aguda en pacientes hospitalizados por Covid-19 se asoció a un mal pronóstico.
En la Argentina no se cuentan con datos del número de pacientes con insuficiencia renal aguda por Covid19, pero un relevamiento llevado a cabo por la Sociedad Argentina de Nefrología en los principales hospitales y sanatorios mostró que el requerimiento de hemodiálisis de urgencia en las unidades de cuidados críticos aumentó en un 70 por ciento desde el inicio de la pandemia.
El secretario de la entidad, Fernando Lombi, explica que “existe una relación entre el pulmón y el riñón y el Covid ingresa en estos órganos y genera complicaciones que, de no ser tratadas, pueden llegar a terminar en insuficiencia renal”. Por su parte, Guillermo Rosa Diez, presidente de la Sociedad Argentina de Nefrología, señala que “hay dos aspectos del Covid: una asociación entre el virus y la insuficiencia renal aguda y los pacientes con deficiencia renal previa que se contagian. Esos pacientes son los de más riesgo. Además sabemos que un gran porcentaje de pacientes que requieren ventilación mecánica durante la internación necesitan algún tipo de terapia renal, como es la diálisis en el momento”.
Lombi alertó que los problemas renales pueden aparecer luego de la internación. “Algunos pacientes pueden tener problemas tras el alta. Por eso es importante hacer estudios después de la internación. Es muy simple: con una muestra de orina ya se puede saber. Algunas veces se complementa con una ecografía”. Agregó que las vacunas protegen a los órganos de desarrollar estos problemas.
Rosa Diez reveló que están llevando adelante un estudio para determinar cómo responden los pacientes con insuficiencia renal crónica a la vacunación. “Estamos estudiando a los que recibieron la Sputnik. Porque estos pacientes pueden generar menos protección y quizá necesiten una tercera dosis”, señala.