Pedido por Cuba en el Vaticano
Fue al regresar a sus mensajes dominicales tras su cirugía intestinal y al cumplirse una semana de las inéditas protestas que sacudieron al régimen de Cuba. Francisco pidió construir “en paz, diálogo y solidaridad una sociedad más justa y fraterna”.
A una semana de las masivas protestas en la isla, un nutrido grupo de cubanos repitió su reclamo de libertad en la tradicional misa dominical del Papa. “Estoy cerca del querido pueblo cubano en estos momentos difíciles”, dijo, y llamó al diálogo y a la paz en Cuba.
Dos semanas después de una cirugía en la que se le extirpó la mitad del colon, el Papa reanudó ayer su tradicional aparición del domingo para saludar a los fieles desde una ventana del Vaticano en su mensaje del Angelus. En esta ocasión, se manifestó “cercano al pueblo cubano” y llamó a un diálogo que pueda distender la tensa situación en la isla tras las multitudinarias protestas de hace siete días que sacudieron al régimen.
Apareciendo en buena forma luego de una intervención que determinó 10 días de internación en el hospital Gemelli, de donde fue dado de alta el miércoles, Francisco ofreció una plegaria en favor de la paz en Cuba. “Ruego al Señor que ayude a construir en paz, diálogo y solidaridad, una sociedad siempre más justa y fraterna”, dijo el pontífice, de 84 años, que visitó a la isla caribeña en septiembre de 2015, cuando todavía estaba al mando Raúl Castro.
Luego, el pontífice argentino se declaró “cercano al querido pueblo cubano en estos momentos difíciles, en particular a las familias que mayormente sufren”.
En ese momento desde la Plaza de San Pedro estalló un clamor de parte de las cientos de personas que se congregaron allí con banderas de Cuba, haciendo la “L” de libertad con sus dedos y portando letreros con leyendas sobre la situación del país, donde el domingo pasado tuvieron lugar protestas que no se veían desde hace años en contra del régimen y que derivaron en una fuerte represión con un muerto y al menos 150 detenidos, según cifras oficiales. Grupos disidentes elevan la cifra hasta 500.
Hace exactamente una semana, Francisco había dado la bendición desde el balcón del Gemelli y expresado su profunda gratitud al personal médico que lo atendió. El pontífice se sometió a una cirugía intestinal el 4 de julio para que le extirparan una parte del colon luego de un estrechamiento intestinal.
Hace una semana, miles de cubanos salieron a las calles en varias ciudades de la isla y en La Habana contra la escasez de alimentos, los apagones de energía eléctrica y la falta de medicamentos en medio de una devastadora pandemia de coronavirus. Los manifestantes también reclamaron un cambio político y mayores libertades en la nación caribeña, que ha sido gobernada por el Partido Comunista desde hace unas seis décadas.
“Exhorto a todos los cubanos a encomendarse a la materna protección de la Virgen María de la Caridad del Cobre, ella los acompañará en este camino”, pidió asimismo el Papa.
El jefe de la Iglesia católica también se refirió a otros eventos de gravedad. De tal manera, expresó su cercanía a los afectados por las inundaciones en Europa, que se cobraron al menos 180 vidas, en Alemania, Bélgica y Holanda. “Que el Señor acoja a los fallecidos y consuele a sus familias’’, dijo Francisco en su mensaje.
Asimismo lamentó la violencia en Sudáfrica, donde más de 200 personas fallecieron por el caos y la violencia que se desató por el encarcelamiento de un expresidente. Francisco señaló que los sudafricanos ya han sufrido las dificultades económicas y de salud provocadas por la pandemia de coronavirus. Dijo que hacía un llamamiento sincero a los esfuerzos por la paz y para que la ayuda llegue a los necesitados.
“Que no se olvide el deseo que ha guiado al pueblo sudafricano de renacer en concordia entre todos sus hijos’’, dijo el Pontífice. Hacia el final desde una ventana del Palacio Apostólico, en la que improvisó en ocasiones y se detuvo un momento para toser, Francisco parecía un poco cansado. Pero concluyó con una firme y alegre invitación a la multitud, como suele hacer, para que “tengan una buena comida’’ y rezaran por él.
Los cientos de personas que había en la plaza aplaudieron. Algunos ondeaban banderas de sus países y una pancarta con un corazón rojo y el mensaje “Te amo’’ en italiano.
Salvo por la cita de ayer, el Papa no tiene otros actos públicos previstos para el resto del mes. Ya antes de que se anunciara la operación, el Vaticano había dicho que sus audiencias semanales de los miércoles no se celebrarían en julio. Antes de la cirugía, , Francisco anunció que visitaría Hungría y Eslovaquia en septiembre.w
El mensaje del Angelus del Papa fue celebrado por los cubanos que lo vivaron en San Pedro.
El Papa oró por víctimas de la violencia en Sudáfrica y de las inundaciones europeas.