Central no falló y es el único representante argentino en la Copa
Sin grandes sobresaltos, Central superó en Rosario a Deportivo Táchira por 1 a 0 y accedió a los cuartos de final de la Copa Sudamericana. Aunque el 2 a 2 que logró como visitante lo favorecía en lo previo y obligaba a su adversario a ganar o alcanzar una igualdad con varios goles, Central expuso desde el principio que no pensaba ceder el control del juego.
Con Vecchio como conductor, la sociedad por la banda izquierda de Ferreyra y Blanco, y el aporte en ataque de Zabala, el equipo del Kily González se adueñó de la pelota, del terreno y de las acciones riesgosas que ofreció la primera etapa.
El dominio terminó con previsibles consecuencias: a los 41’ Vecchio recorrió 35 metros con la pelota, aprovechando el espacio que le abrieron volantes y defensores rivales, engañó al arquero con un movimiento y definió con el arco libre.
La apertura del marcador, demorada, era merecida. Pudo llegar antes, pero Varela, arquero de Táchira, lo impidió ante un remate de Dupuy. Sobre el cierre de la etapa se repitió ese duelo y Varela volvió a ganar con otra tapada extraordinaria.
La visita nunca pudo sostener la posesión de la pelota en lapsos importantes de tiempo y el arco de Central siempre le quedó lejos. Apenas mostró algunos destellos de Covea, su habilidoso y solitario conductor.
Con sus obligaciones --también
con sus limitaciones-- a cuesta, Táchira se paró más adelante en el complemento y al menos logró repartir el dominio. Central ya no fue el claro dominador, pero de contra, y con la sabia conducción de Vecchio, siguió generando acciones de peligro que agigantaron la figura de Varela.
En cuartos de final, Central enfrentará a Bragantino de Brasil.●