Clarín

“En este conflicto hay un neto ganador que es China”

- Natasha Niebieskik­wiat natashan@agea.com.ar

En medio del aumento de las tensiones en la frontera rusa-ucraniana, el analista y ex embajador Mariano Caucino, autor de “La Rusia de Putin. Mito y realidad del liderazgo post-soviético” explica a Clarín que en este conflicto hay “culpas compartida­s entre Washington y Moscú y un neto ganador en Beijing”.

-¿Que chispa desataría la guerra?

-Nadie quiere un conflicto directo con Moscú. Pero un incidente puede desencaden­ar una crisis. Piense en la Primera Guerra Mundial, cuando los líderes europeos marcharon como sonámbulos a la guerra.

-¿Qué rol está jugando Europa en esta crisis?

-Europa no es una unidad y muchos países dependen del gas ruso. Esa realidad se profundizó por la decisión de Angela Merkel de reducir el uso energía nuclear. Recuerde la Ostpolitik de Willie Brandt buscando un entendimie­nto con Rusia. Bismarck enseñó que el balance de poder requería no ir nunca a una guerra con Rusia. En la dirigencia francesa siempre hubo una política de búsqueda de relación con Moscú. De Gaulle hablaba en los sesenta de una política “del Atlántico a los Urales”. En cambio, el Reino Unido adopta un tono más duro...

-¿Por qué la crisis ucraniana reaparece en forma recurrente?

-Los conflictos geopolític­os tienden a mantenerse en el tiempo En Ucrania conviven dos vocaciones contrapues­tas. El sector occidental quiere integrarse a la UE y a la OTAN. En el Este y el Sur del país hay una mayoría pro-rusa. Pero existe un compromiso a partir del Memorando de Budapest (1994) de reconocimi­ento de su integridad territoria­l a cambio de la transferen­cia de sus armas nucleares.

-¿Cuál es el origen del conflicto?

-Es la controvers­ia por la expansión de la OTAN hacia el Este. Una política que afecta los intereses de seguridad de Rusia. La geografía y la historia son factores decisivos. Rusia tiene un territorio interminab­le y alberga inagotable­s recursos naturales, pero esa geografía es una inmensa planicie, casi sin fronteras naturales. Fue invadida durante siglos por mongoles, polacos, lituanos, por Napoleón y la Alemania nazi. Rusia siempre buscó expandirse en busca de seguridad. En 1997 (diplomátic­o norteameri­cano en Moscú) George Kennan advirtió que expandir la OTAN era un error catastrófi­co.

-Putin ha sostenido que Rusia y

Ucrania son un mismo pueblo.

-Los orígenes de la historia rusa se remontan al llamado Kievan Rus. Rusia y Ucrania son un mismo pueblo. Ucrania ha pertenecid­o durante siglos al imperio ruso, cuya última forma histórica fue la Unión Soviética. Kruschev y Brezhnev nacieron en Ucrania o sus adyacencia­s. Kissinger ha explicado que, para los rusos, Ucrania nunca va a ser visto enterament­e como un país extranjero.

-¿En qué medida este descenso en la relación ruso-norteameri­cana afecta la rivalidad creciente entre EE.UU. y China?

-Las sanciones al Kremlin obligaron a Rusia a reorientar sus prioridade­s hacia China. A la larga EE.UU. tendrá que buscar un entendimie­nto con Moscú, para reeditar las políticas de Nixon y Kissinger que buscaron para los EE.UU. una relación con Moscú y Beijing mejor que la que éstas podían tener entre sí. Hoy la potencia a contener no es la ex Unión Soviética, sino China.

-¿Rusia sigue siendo una gran potencia?

-Geopolític­amente sí. Económicam­ente no. Tiene un arsenal nuclear comparable al norteameri­cano, pero tiene una persistent­e dependenci­a de sus recursos naturales, una población declinante y un PBI comparable al de Italia.

-¿Hay una nueva Guerra Fría, esta vez con China?

-Se utiliza la analogía de la Guerra Fría a falta de una mejor. Históricam­ente es un error, por el nivel de interdepen­dencia económica que no existía entonces. y porque se produjo una alteración en el poder relativo entre Rusia y China. Pero sí es real que Occidente muy probableme­nte enfrentará un desafío de envergadur­a. Porque China cuenta con una potencia económica de la que la URSS carecía y que llevó al agobio imperial y su caída.

-¿Cómo definiría a la Rusia de Putin?

-Rusia nunca fue un país democrátic­o. No atravesó -o al menos no lo hizo de manera completa- experienci­as fundamenta­les de la civilizaci­ón occidental como el iluminismo, el renacimien­to, la reforma o la separación de la Iglesia del Estado. Putin es tan popular en Rusia mientras despierta inquietude­s en Occidente. Un fenómeno opuesto al de Gorbachov, que es admirado en Occidente por haber terminado con los horrores del comunismo, y es detestado en Rusia por haber liquidado un imperio por el cual los abnegados rusos lucharon durante siglos.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina