Clarín

Otro giro de Alberto: ahora dicen que participar­á del Tedeum por el 25 de Mayo

No irá a la Antártida, por razones climáticas. En Casa Rosada niegan que existan tensiones con la Iglesia.

- Ignacio Ortelli iorteli@clarin.com

Alberto Fernández decidió no viajar a la Antártida, donde tenía previsto encabezar los festejos por el 25 de Mayo, y confirmó que participar­á del tradiciona­l Tedeum en la Catedral porteña, a pesar de la tensión con la Iglesia Católica.

"Había que definir si viajaba o no: nunca estuvo en duda que si se quedaba en Buenos Aires, iba al Tedeum", sostuviero­n fuentes oficiales ante Clarín. Y se esforzaron por aclarar que "no hay tensión con la Iglesia", a pesar de las versiones que se multiplica­ron en las últimas horas, luego de que el Papa Francisco recibiera al ministro del Interior, Eduardo "Wado" de Pedro, un dirigente muy cercano a Cristina Kirchner, y le cancelara una audiencia al canciller Santiago Cafiero, hombre de mayor confianza de Fernández.

La jugada del Sumo Pontífice no fue clara: adujo un dolor de rodilla, sin embargo luego trascendió que ese mismo día recibió a un grupo de jóvenes misioneros. Encima, en las últimas horas posó con el gobernador de Chaco, Jorge Capitanich, otro alfil ultra K que se anotó en la carrera presidenci­al luego de compartir un acto con la vicepresid­enta.

Así, se especuló que Fernández, con su viaje a la Antártida y el faltazo al Tedeum, se proponía enviar un mensaje a la Iglesia y, de paso, evitar lo que se espera será una homilía más dura del arzobispo Mario Poli, en medio de la crisis económica y el impacto de la inflación.

Lo curioso es que la Iglesia en 2020 se alineó con el pedido del Gobierno de extremar los cuidados sanitarios. Por primera vez el Tedeum se hizo a puertas cerradas y en el mensaje de Poli hubo un guiño para la estrategia oficial: "Contarnos entre los países que cuidamos la vida nos enorgullec­e", dijo el prelado, con Fernández siguiendo desde Olivos.

Ya en 2021, con la dirigencia política agrietada nuevamente, Poli pidió “grandeza” y ”diálogo”.

Luego de que Clarín anticipara que no viajaría, Fernández dio una entrevista a AM 990 y lo oficializó: “Quería a la Antártida pero me avisaron que las condicione­s climáticas eran adversas. Así que haremos el Tedeum en Buenos Aires e iré a comer un locro a un barrio”, avisó.

Y negó cualquier diferencia con la Iglesia. “Por supuesto lo llamé al cardenal Poli y le expliqué porqué quería ir a la Antártida y le dije que el lunes avisaba”, contó, para desactivar los rumores que daban cuenta de tensiones con el Episcopado.

En el Gobierno, en esa misma línea, agregan: "Es un Presidente que está rodeado de dirigentes con excelente relación con la Iglesia y el Papa", sostienen en el entorno presidenci­al. Y enumeran a dirigentes con fluidos vínculos con El Vaticano. "¿Manzur, Beliz y Olmos pueden tener problemas con el Papa? Está todo bien con la Iglesia", enfatizan.

Sin embargo, en la previa a esta definición, fuentes oficiales reconocían que al Presidente "no lo entusiasma mucho (estar en el Tedeum)", la idea de estar en la Catedral porteña.

La suspensión del viaje a la Antártida se acordó en Casa Rosada, tras recibirse el informe meteorológ­ico que le prepararon al ministro de Defensa, Jorge Taiana. "No hay condicione­s para viajar", aseguraron desde el entorno del jefe de Estado.

En principio, el Presidente tenía previsto viajar con una comitiva reducida, a pesar del interés de varios integrante­s del Gabinete de conocer el continente blanco.

Se descontaba la presencia de Taiana, un ultrakirch­nerista que sin embargo mantiene una buena relación con Fernández. Al cabo, el ministro fue el que le acercó al Presidente la idea de que visitara la Antártida.

Fue a principios de este mes, cuando encabezó un homenaje a los 323 argentinos que murieron por el hundimient­o del Crucero General Belgrano durante la Guerra de Malvinas.

El Presidente dio el visto bueno y por eso se aguardaba un informe que la Fuerza Aérea sólo puede realizar a tan solo horas del viaje: permite saber si hay una "ventana" climática para garantizar la llegada y la salida desde la Base Marambio. El trayecto se realiza en un avión C-130 Hércules.

A la mañana, al secretario general de Presidenci­a, Julio Vitobello, le confirmaro­n que no sería posible hacer el viaje. Fernández quería incluso trasladars­e a la Base Esperanza, donde viven familias y funciona la escuela primaria, para dar desde allí un mensaje por la fecha patria. Fernández iba a ser el tercer presidente argentino en viajar a la Antártida, el primero desde Carlos Menem, quien pisó la Base Marambio en 1997. ■

 ?? GERMÁN ADRASTI ?? A la Catedral. Fernández en el acto de ayer en Casa Rosada para presentar los nuevos billetes.
GERMÁN ADRASTI A la Catedral. Fernández en el acto de ayer en Casa Rosada para presentar los nuevos billetes.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina