Europa analiza escoltar con buques de guerra los granos ucranianos
Es una medida drástica ante el bloqueo militar que está aplicando Rusia sobre los puertos de Ucrania.
El ataque ruso a Ucrania puede provocar la peor crisis alimentaria global en décadas. El campo ucraniano es origen de granos y otros insumos agroalimentarios de los que se alimentan más de 600 millones de personas en todo el mundo. Si durante décadas el país fue conocido como “el granero de Europa”, ahora es el origen de las importaciones de granos de muchos países europeos, sobre todo los del mundo árabe.
Ucrania es una potencia mundial en trigo, maíz o aceite de girasol, pero la guerra cerró la puerta a las exportaciones. También está entre los seis primeros productores mundiales de carne de ave y miel. El 10% de su PBI en tiempos de paz viene de sus exportaciones agroalimentarias a través del Mar Negro.
Los gobiernos europeos empiezan a buscar soluciones. La primera idea, que tendrá poco recorrido porque su capacidad será menor, es la de sacar exportaciones ucranianas por ruta o trenes y encaminarlas a través de Polonia hasta el Mar Báltico, donde serían embarcadas.
Es una solución engorrosa y al albur de que Rusia no bombardee trenes de carga o camiones. Sólo permite que salgan del país una quinta parte de las exportaciones que deberían estar saliendo.
Otra idea empieza a abrirse paso en Bruselas y en algunos gobiernos europeos. Se trataría de montar una misión militar naval, no específicamente de la Unión Europea o de la OTAN sino en la que participarían voluntariamente los países que quisieran.
Esa misión naval escoltaría desde el puerto de Odesa y otros en el sur de Ucrania a los mercantes que recogieran los insumos agroalimentarios y los llevaría hasta los estrechos turcos para ponerlos a resguardo en el Mediterráneo.
El cruce de los estrechos turcos del Bósforo y los Dardanelos está regido por Turquía, según la Convención de Montreux de 1936. Ese tratado permite a Ankara cerrarlo al paso de navíos de potencias beligerantes. En principio, ahora mismo no deja que buques rusos de fuera del Mar Negro accedan a él.
Los diplomáticos europeos venían estudiando la idea confidencialmente desde hace semanas hasta que este martes, en Davos, la hizo pública el presidente estonio Alar Karis, que aseguró que la prioridad es que Ucrania pueda seguir exportando porque necesita el dinero y porque muchos países en desarrollo necesitan esos insumos agroalimentarios.
Para Naciones Unidas y su Programa Mundial de Alimentos, el bloqueo de los puertos ucranianos por parte de Rusia amenaza con desatar una crisis alimentaria global y las masivas olas de refugiados. Fuentes diplomáticas en Bruselas reconocen que el debate está en la mesa de los gobiernos.w