El blue está quieto desde enero: la advertencia de los expertos
En una economía donde los precios suben sin techo, el dólar paralelo quedó congelado. Pese a que la semana pasada tanto el tipo de cambio libre como los financieros terminaron en alza con respecto al cierre del viernes anterior. En los últimos cinco meses el valor del blue no ha presentado grandes variaciones.
Los analistas creen que, además de una ayuda internacional por la apreciación de las monedas de los países vecinos, haber logrado cerrar el acuerdo con el Fondo antes de que termine el primer trimestre del año funcionó como ancla para las expectativas en el mercado cambiario.
Ahora, con las metas pactadas con el organismo puestas en duda, creen que el ruido político y económico se trasladaría al mercado cambiario.
El viernes pasado, el blue cerró en $206,5, una suba semanal de $2,5. Sin embargo, este precio es más bajo que el 1 de enero de este año. Mucho más lejos se ubica de su récord nominal de $223 alcanzado hacia fines de ese mismo mes, cuando la posibilidad de un default con el FMI estaba latente.
Una dinámica similar mostraron los dólares financieros, que si bien el viernes terminaron levemente bajistas, en el acumulado mensual suben luego de haber estado varias semanas estables: el dólar MEP acumula una suba de 2% en mayo; mientras el contado con liquidación, en torno a los $210, avanzó 1,8% este mes.
Si se toma en cuenta que tanto los consultores como el equipo económico del Gobierno esperan una inflación del orden del 5% para este mes, la única cotización que amaga a seguir de cerca la suba de los precios de la economía es la del dólar mayorista, que sube en lo que va de 2022 15,6%, aunque el costo de vida supere el 28%.
“El mercado esta más cauto y podría descontar mayor riesgo por el eventual incumplimiento de las metas con el FMI a fin de Junio”, dijo Fernando Marull, de FMyA. “La meta fiscal de junio no se cumpliría, las reservas netas no suben lo suficiente (porque el agro liquida pero el BCRA no logra evitar que se le filtren los dólares”, detalló.
A estas señales amarillas se suma la necesidad de financiamiento del Tesoro, acotadas por un menor margen para la emisión monetaria. “En FMyA asumimos que el FMI dará algún tipo de waiver. Igualmente, el ruido alcanzará a poner presión al dólar paralelo, que sigue sin reflejar el salto de la inflación de 2022 a 70% (y con riesgo a que sea 75%)”, afirmó.
Su colega Guido Lorenzo, de LCG, coincidió: “El gran interrogante es qué va a hacer el FMI cuando en septiembre de este año revise el no cumplimiento de los objetivos al mes de junio. Argentina pedirá un waiver y tendrá que mostrar que, más allá del contexto internacional, se han hecho esfuerzos para lograr las metas cuantitativas”.w