Alberto Fernández viaja a Los Angeles en medio de un nuevo tembladeral político
Parte este martes a la noche, tras haber echado al ministro Kulfas, quien integraba su comitiva.
Alberto Fernández hablará ante el pleno de presidentes de la IX Cumbre de las Américas este viernes por la mañana, en el Centro de Convenciones de Los Angeles. Para entonces también ya estarán haciendo la llamada foto de familia y seguido de un almuerzo cada líder emprenderá su regreso a casa.
Salvo que vuelva a improvisar como lo viene haciendo, Alberto F. debería calibrar un discurso que integre el reclamo que le pidieron que haga Andrés Manuel López Obrador y Nicolás Maduro contra la exclusión en la cumbre de Venezuela, Cuba y Nicaragua con otro que sea en su propio beneficio y de Argentina teniendo en cuenta que Joe Biden lo acaba de invitar a un encuentro a solas en la Casa Blanca para el 25 de julio.
Pero si algo le faltaba al viaje que mañana iniciará Fernandez por la noche a California, es el nuevo tembladeral político con el cristinismo y con los propios albertistas tras el despido repentino de Kulfas.
La nueva tormenta en su delicada convivencia con Cristina Kirchner y La Cámpora explotó tras la inesperada movida de Energía Argentina con un comunicado retuiteado luego por Cristina Kirchner en el que hicieron público un off the record con críticas a la vicepresidenta y su gente y una grave denuncia de presunta corrupción que le adjudicaron al ahora ex ministro de Desarrollo Productivo.
Kulfas era parte de la comitiva que volará a Los Angeles en otro charter de Aerolíneas Argentinas este martes a la noche. Santiago Cafiero mantendrá la primera reunión multilateral, el miércoles, en el plenario de cancilleres. Y la primera de las tres entrevistas con presidentes que tiene por ahora agendadas Alberto F. es con el peruano Pedro Castillo.
Entre miércoles y viernes mantendrá encuentros a solas con Gabriel Boric, de Chile, y Justin Trudeau, de Canadá. A Biden lo verá en los plenarios de jefes de Estado que comienzan el mismo miércoles a las 17 hora local y en una cena con la que el presidente agasajará a sus invitados el jueves, en el museo del Getty Center. Cafiero tendrá la suya con el secretario de Estado Antony Blinken y los otros cancilleres en el County Museum, de LA.
Kulfas tenía bilaterales en Los Angeles con directivos de Fedex, Google, Motion Picture, General Motors, Amazon, Glaxo. Seguía viaje a Canadá a una cumbre de minería. Daniel Scioli quien asumiría la semana que viene en reemplazo de Kulfas, no aparece en la comitiva.
En numerosas consultas de Clarín este fin de semana con funcionarios del gobierno imperaba un fuerte desánimo. Primero porque pensaban que el acto con Cristina Kirchner por los 100 años de YPF empezaba a limar asperezas y de pronto saltó por el aire Kulfas. Alberto viaja golpeado primero por el cristinismo duro que logró desplazar a uno de los funcionarios más odiados por Cristina. Pero en el albertismo la sensación también es que el presidente "entrega a los propios" sin ningún rodeo cuando hace falta. "No hay red", replican.
Fernández había puesto en dudas su participación en la Cumbre por las exclusiones del cubano Miguel Díaz Canel, el venezolano Nicolás Maduro y el nicaragüense Daniel Ortega. Hasta planeó hacer una reunión alternativa a la que organiza Biden, en su calidad de presidente pro témpore de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños. La “contracumbre” fue desactivada por México.
Fernández igual nunca fue tajante como el mexicano López Obrador y el boliviano Luis Arce que forman parte de los que no van, en protesta por las exclusiones.
Pero mientras Alberto decidía qué hacer, Cafiero envió a Los Angeles al subsecretario de Asuntos Latinoamericanos, Gustavo Martínez Pandiani, a discutir los documentos. Y el embajador Jorge Argüello negociaba el llamado de Biden del jueves pasado en el que llegó la invitación para la Casa Blanca. A la comitiva se sumaría Fabiola Yañez, Las primeras damas de las Américas tienen varias actividades bajo la conducción de Jill Biden, esposa del presidente estadounidense. ■