Hoy empieza la Cumbre de las Américas y hay dudas sobre sus participantes
Varios países no irán en rechazo a la exclusión de Venezuela, Cuba y Nicaragua. La reunión durará hasta el viernes.
Banderas, escenarios, seguridad: todo parece estar listo en Los Ángeles para el comienzo hoy lunes de la Cumbre de las Américas, la máxima cita continental que se extenderá hasta el viernes, pero falta un “detalle” inédito que tiene en vilo a la región y a los Estados Unidos: a horas del inicio de la reunión no hay certeza sobre quien vendrá. La Casa Blanca busca hasta último momento evitar un fracaso de convocatoria y confía en que habrá “una sólida representación” de naciones que pueda ayudar a impulsar una agenda de temas que definitivamente ya pasó a segundo plano.
En el marco de la Cumbre, hoy comienzan reuniones de la sociedad civil y los días siguientes seguirán encuentros de líderes empresariales. El miércoles comienza el plato fuerte de la Cumbre, que será la reunión de los jefes de Estado y de Gobierno, que deberían terminar de afilar los temas centrales de todos los encuentros: un futuro verde y energía limpias; prosperidad económica, gobernanza democrática; la recuperación post pandemia, migración e infraestructura digital. Pero la enorme polémica que se ha armado en torno de la lista de invitados ha convertido casi en una anécdota los objetivos de la Cumbre.
Algo inusual para la meticulosidad diplomática de este país, la Casa Blanca no ha difundido la lista oficial de invitados a la IX Cumbre, sino que ha enviado sigilosamente a casi todos los países de la región cartas formales con el convite, con la excepción de tres mandatarios: el cubano Miguel Díaz Canel, el venezolano Nicolás
Maduro y el nicaragüense Daniel Ortega, quienes son considerados dictadores y violadores de derechos humanos por la Casa Blanca.
La cautela de la Casa Blanca en oficializar la lista se debe a la irritación que causó la exclusión de Cuba, Venezuela y Nicaragua entre algunos líderes regionales, sobre todo el mexicano Andrés Manuel López Obrador, el boliviano Luis Arce, la hondureña Xiomara Castro y el argentino Alberto Fernández, que condenaron la ausencia y amenazaron con un boicot si no iban todos. Si bien el funcionario del Departamento de Estado Kevin O´Reilly dijo ante una comisión del Senado que Venezuela y Nicaragua no están invitados, evitó confirmar la exclusión de Cuba, lo que indica que hasta último momento podría haber sorpresas con la participación de algún funcionario cubano de bajo rango en calidad de observador. El portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, dijo en una rueda de prensa días atrás: “Confío en que tendremos una sólida representación de todas las Américas en la cumbre”.
La Casa Blanca está intentando hasta último momento convencer a los presidentes que amenazan no venir. Terminó alineando a prácticamente todo el Caribe, también al brasileño Jair Bolsonaro, a quien ofreció una bilateral con Joe Biden en los márgenes de la Cumbre, y también a Fernández, a quien invitó a la Casa Blanca en julio.
Estados Unidos hizo algunos gestos para convencer a los “rebeldes”, aunque también soporta embates desde los exiliados cubanos, venezolanos y nicaragüenses, la mayoría asentados en Florida. Primero alivió algunas sanciones contra Cuba y también autorizó a Chevron, Eni y Repsol a explotar sus yacimientos de gas y petróleo en Venezuela. También deslizó la idea de invitar a algún representante cubano en la Cumbre. Otra iniciativa fue no invitar a Los Angeles al líder opositor venezolano Juan Guaidó, que EE.UU. y varias decenas de países consideran presidente legítimo de Venezuela.
Pero parece que estas iniciativas no han surtido demasiado efecto en López Obrador que, hasta ahora, ha dicho que no viajará y enviará a su canciller, Marcelo Ebrard. “México no necesita cumbre con EE.UU. porque tiene conversaciones todos los días, pero es un gran error de AMLO no ir”, dijo a Clarín Erick Langer, historiador y profesor de Georgetown University. Además, que no vaya es un fuerte dolor de cabeza para Biden porque “México es una pieza clave en el tema de migración y su ausencia es grave”. Honduras ya avisó que no irá la presidenta Castro y que en su lugar asistirá el canciller. Tampoco irá el boliviano Arce. Después de varias idas y venidas, Fernández finalmente confirmó su asistencia y se estima que, como presidente protémpore de la CELAC (la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños), será la voz cantante de los excluidos en la Cumbre.w