Crece la protesta indígena en Ecuador y el gobierno advierte que buscan derribar a Lasso
“Las Fuerzas Armadas no permitirán que se rompa el orden constitucional”, alertó el ministro de Defensa, rodeado del alto mando militar. Marchas sobre la capital.
La crisis social y política se agravó en Ecuador en el noveno día de protestas convocadas por el poderoso bloque indigena, que está paralizando el país con los cortes de ruta. El gobierno y las Fuerzas Armadas acusaron a los manifestantes de “atentar contra la democracia”, y advirtieron que no permitirán que se rompa el orden constitucional.
“La democracia de Ecuador está en serio riesgo. Se trata de un intento degada liberado de utilizar la violencia para atentar en contra de la democracia y amenazar las instituciones. Las Fuerzas Armadas no permitirán que se intente romper el orden constitucional o cualquier acción en contra de la democracia o las leyes”, alertó el ministro de Defensa, Luis Lara, escoltado por toda la plana mayor de las Fuerzas Armadas.
Convocados por la poderosa Confederación de Nacionalidades Indígenas (Conaie), los manifestantes reclaman al gobierno de Guillermo
Lasso la reducción del precio de los combustibles, en protestas que llevan ya nueve días y que están afectando la distribución de combustible y productos alimenticios. En casi un año, el diésel subió un 90% (a 1,90 dólares) y la gasolina un 46% (a 2,55). La Conaie, liderada por Leonidas Iza, reclama rebajarlos a 1,50 y 2,10 dólares, respectivamente.
Los indígenas también reclaman el control de precios de los productos esenciales, un mejor pago a productores agrícolas y frenar la expansión de la minería. “A nosotros los pequeños agricultores nos han subido bastantísimo las cosas (insumos y abonos) y nuestros productos no suben nada”, señaló Tito Zamora, dirigente de Sigchos, en Cotopaxi.
La proclama del ministro Lara repercutió con fuerza en un ambiente de gran tensión social, que ayer se profundizó debido a violentas manifestaciones en Quito, que fueron dispersadas por las fuerzas policiales. Desde el lunes, las protestas se han concentrado en esta ciudad con la llede miles de indígenas de las provincias andinas para hacerse sentir con más fuerza y desafiar el estado de excepción decretado por el Gobierno en seis provincias, entre ellas Pichincha, donde está la capital. Los numerosos cortes de avenidas y accesos obligaron a suspender el transporte público en la capital.
Las Fuerzas Armadas “contemplan con enorme preocupación la manipulación de la protesta social, el crecimiento de la violencia por parte de quienes han rechazado el diálogo, principio fundamental de la convivencia en libertad y democracia para intentar imponer al Estado sus peticiones”, señaló Lara.
“Ellos buscan el caos, quieren botar (echar) al presidente. Yo estoy aquí, yo no voy a escapar, pero yo estoy aquí para proteger a cada una de sus familias, sobre todo, a los más pobres”, indicó Lasso en un video que difundió por Twitter. Este martes, han aumentado las manifestaciones con el corte de varias rutas en el país, mientras en Quito se bloquearon las principales vías de acceso.
El ministro de Defensa sostuvo que “las acciones de protesta social son legítimas, siempre y cuando no atenten contra las garantías y derechos de la mayoría de los ciudadanos a vivir en paz, trabajar, circular por el territorio, producir y educar a sus hijos en un país libre y sin violencia”.
En este caso, afirmó, las manifestaciones y cortes de ruta son producto de “la acción concertada de personas exaltadas que impiden la libre circulación de la mayoría de los ecuatorianos”. Y advirtió que existe un hecho aún más grave: “Estas acciones coinciden con el brutal ataque criminal que el país ha venido sufriendo por parte de los narcotraficantes y el crimen organizado”.
Ecuador, cuya dolarizada economía intenta recuperarse del golpe de la pandemia, pierde unos 50 millones de dólares por día a raíz de las protestas, sin tomar en cuenta el sector del petróleo, el principal producto de exportación, según cifras difundidas por organismos oficiales.
La estatal Petroecuador registra una pérdida acumulada de casi 64.300 barriles de la producción total debido a que más de 230 pozos están “apagados” por las manifestaciones en la Amazonía.
El presidente Lasso, que asumió en mayo de 2021, viene denunciando que el movimiento indígena lo quiere sacar del cargo. “Hemos tendido la mano, hemos llamado al diálogo, pero ellos no quieren la paz, ellos buscan el caos, quieren botar al presidente”, declaró el gobernante en un video divulgado en Twitter.
La Conaie es una agrupación con gran poder de convocatoria. Participó en revueltas que derrocaron a tres mandatarios entre 1997 y 2005. En 2019, protagonizó violentas protestas que dejaron 11 muertos, más de 1.000 heridos y que obligaron al ex presidente Lenín Moreno a dar marcha atrás en un plan para eliminar los subsidios a los combustibles como parte de un acuerdo con el FMI.w