Arrancaron las nuevas auditorías de los planes sociales
Se realizan en forma virtual y durante el primer día se anotaron más de 57.000 personas.
El Gobierno puso en marcha ayer las nuevas auditorías virtuales de planes sociales a través de la aplicación Mi Argentina. En el primer día se anotaron 57.278 personas. Como anticipó la ministra de Desarrollo Social, Victoria Tolosa Paz los beneficiarios del Potenciar Trabajo que no completen la nueva fiscalización antes del 6 de enero, perderán el beneficio que representa la mitad del salario mínimo, vital y móvil.
Luego de que se filtrara un informe de AFIP a Desarrollo Social que daba cuenta de miles de presuntas incompatibilidades, el Ejecutivo
aceleró la puesta en marcha de las
nuevas auditorías en las que ya venía trabajando. Tras un entrecruzamiento de datos con el organismo que conduce Carlos Castagneto y el Banco Central, Tolosa Paz, en tanto, anunció la inmediata suspensión 3.190 beneficiarios de planes sociales que presentaban irregularidades por haber comprado dólar ahorro o por consumos excesivos con tarjeta de crédito.
El recorte por ahora es ínfimo: representan apenas el 0,3 % del universo de 1.362.000 personas inscriptas en el Potenciar Trabajo, el programa que está bajo la órbita del secretario de Economía Social y líder del Movimiento Evita, Emilio Pérsico, y que consume la mitad del presupuesto anual de la cartera.
La nueva auditoría convivirá por ahora con los controles en el territorio que llevaban adelante desde agosto cinco universidades nacionales. En Desarrollo Social consignaban que la fiscalización de las casas de estudio, aunque fuera más exhaustiva, era demasiado lenta. Hasta el 11 de noviembre apenas se habían relevado 51.522 beneficiarios, menos que los censados digitalmente en un día.
El nuevo formulario es sustancialmente más breve que las 34 preguntas que incluía la auditoría que lanzó el ex ministro Juan Zabaleta. La auditoría virtual de tres etapas no incluye preguntas sobre otros beneficios sociales que cobren eventualmente otros integrantes del grupo familiar del inscripto, como AUH, asignaciones por discapacidad, subsidios para salud o becas Progresar, entre otras. En cambio, sí interroga si hay convivientes que requieran asistencia permanente o tengan alguna discapacidad.
De acuerdo a una estimación que hacían en Desarrollo Social por las ausencias a las convocatorias presenciales de las auditorías de las universidades, había un 20% de potenciales irregularidades. De cada 10 beneficiarios que convocaban, en promedio 2 no iban.
La nueva auditoría es menos profunda y tampoco inquiere sobre otro tipo de asistencia estatal gratuita que los beneficiarios pueden percibir, como el envío de leche, alimentos frescos y bolsones de alimentos secos ni sobre otros ingresos que reciban eventualmente los beneficiarios del programa.
El proceso de validación electrónico también es más conciso a la hora de desplegar consultas sobre el tipo de actividad al que pueden optar los beneficiarios del Potenciar: productivas o comunitarias; cursos de capacitación; terminalidad educativa o ninguna. La anterior encuesta, en cambio, permitía optar entre las diferentes actividades inscriptas en el Renatep). El nuevo control pregunta a los beneficiarios si están interesados en continuar con la misma actividad, si cobran el Potenciar y si conocen la Unidad de Gestión que certifica sus actividades . ■