El Gobierno dice que Alberto F. ya está “en perfecto estado de salud”
La suspensión del viaje que el Presidente tenía previsto hacer a Corrientes el miércoles volvió a encender las alarmas. Las primeras versiones dieron cuenta de que había obedecido a una recomendación médica luego de la "gastritis erosiva con sangrado" que sufrió en la gira por Bali y que lo obligó a guardar reposo. En ese contexto, el Gobierno salió a aclarar que Alberto Fernández ya se encuentra bien y reactiva su agenda con reuniones privadas y viajes por el interior del país.
"El Presidente se encuentra en perfecto estado de salud. Necesitaba unos días de reposo, que realizó desde el sábado (cuando se hizo los estudios) hasta el martes, que se reincorporó a sus tareas", explicó la portavoz Gabriela Cerruti, en su habitual conferencia de prensa. "Ya está pleno y llevando adelante todas sus actividades desde el martes a primera hora en la Casa Rosada", reforzó.
La funcionaria indicó que "no haber ido a Corrientes no tiene nada que ver con su estado de salud". "Retomó su agenda pero recibió la invitación a último momento, por eso no concurrió", precisó sobre el desembarco que Fernández iba a realizar junto al jefe de Gabinete, Juan Manzur, para participar de la reunión de gobernadores del Norte grande.
Las especulaciones se dieron luego de que Fernández cancelara su visita tres horas después de que desde Presidencia confirmaran a la provincia su presencia en el evento. Se sumó así a la cancelación del viaje que tenía previsto realizar a México. "Fue exclusivamente un tema de agenda, está muy bien de salud", insistió una alta fuente de Gobierno.
En la conferencia de prensa, Cerruti tuvo que hacer dos aclaraciones sobre la salud de Fernández. "Ya está pleno y llevando adelante todas sus actividades desde el martes a primera hora en la Casa Rosada.
Ayer, Fernández arribó alrededor de las 11 a Casa Rosada y se reunió con Manzur, quien lo puso al tanto de lo que fue el desembarco del Gobierno también estuvo el ministro del Interior, Eduardo "Wado" de Pedro- en Corrientes. Cerca del mediodía pasaron por su despacho el embajador en Brasil, Daniel Scioli, y la secretaria de Energía, Flavia Royon.
Luego, el Presidente mantuvo contactos telefónicos, con el ministro de Economía, Sergio Massa, con quien debe definir la suma y el alcance del bono para trabajadores formales. Era una medida alternativa a la suma fija reclamada por el kirchnerismo que, según había adelantado en su paso por Francia, iba a anunciar a su regreso a Buenos Aires. Sin embargo, se demoró más de lo previsto y algunos sectores del Frente de Todos comenzaron a impacientarse. Por las dudas, el Presidente ayer instruyó a la ministra de Trabajo, Kelly Olmos, de su riñón, para que saliera a llevar tranquilidad: "Estamos trabajando en un bono de fin de año para el sector activo encuadrado en paritarias", aseguró la funcionaria en FutuRock.
Mientras recibía novedades del canciller Santiago Cafiero por el reinicio de las negociaciones entre el oficialismo y la oposición de Venezuela, el jefe de Estado también terminó de delinear lo que será su desembarco este viernes por el Conurbano. Será en Pilar, distrito gobernado por Federico Achával, un intendente muy cercano a Máximo Kirchner, para la inauguración de un nuevo centro de primera infancia.w