La economía de EE.UU. gana impulso con un sorpresivo crecimiento de 2,4 por ciento
Los números de la expansión en el segundo trimestre superaron las expectativas.
La economía de EE.UU. desafió los pronósticos pesimistas con un crecimiento acelerado y sorprendente en el segundo trimestre, consignó el ministrio de Comercio este jueves. En el periodo la economía fue impulsada especialmente por los gastos de consumo y el alza de las inversiones.
El crecimiento interanual del PIB se situó en 2,4% en el segundo trimestre del año, de abril a junio, a pesar de que los analistas esperaban un enfriamiento por el alza persistente de las tasas de interés.
Aunque los economistas han venido advirtiendo de una posible ralentización, la economía ha demostrado ser más resistente de lo esperado.
El presidente Joe Biden saludó el crecimiento más sólido de lo previsto como fruto de su “Bidenomics” -nombre que le dio a su política económica-. “La economía crece y nosotros reducimos los gastos para las familias”, estimó el mandatario en un comunicado.
El dato puede impulsar nuevas alzas de las tasas, indicaron los analistas. La próxima reunión de la FED es en setiembre. Esta semana volvieron a aumentar un cuarto de punto los tipos, a 5,25/5,50% el mayor nivel en 22 años.
En el primer trimestre, el crecimiento del PIB se revisó bruscamente al alza, hasta el 2% -desde una estimación inicial del 1,1%-, impulsado por un consumo más fuerte de lo previsto. El jueves, el aumento del PIB
“reflejó incrementos en el gasto de los consumidores, la inversión fija no residencial y el gasto del gobierno estatal y los gobiernos locales”, indicó el Comercio en un comunicado. “Los consumidores aún quieren gastar, aunque se han vuelto cada vez más cautelosos y selectivos”, dijo el analista Gregory Daco, economista jefe de EY-Parthenon.
El gasto de los consumidores continuó creciendo 1,6% en el segundo trimestre, a un ritmo más lento que el primer trimestre. Ese impulso se está moderando con los precios todavía altos y con las condiciones más ajustadas de crédito, explicó Daco.
Por el momento, “el crecimiento del salario real se está volviendo positivo” y ayudando al consumo a medida que la inflación se enfría, agregó.
Las inversiones residenciales cayeron por noveno trimestre seguido, según el último informe del PBI, a pesar de que las inversiones empresariales crecieron el 7,7%. El aumento de las inversiones en estructuras “continúa reflejando el fuerte ímpetu” del gasto gubernamental relacionado con la ley de inversiones en infraestructura y trabajos, la ley CHIPS y de Ciencia, y la Ley de Reducción de la Inflación, añadió Daco.
Pero aunque se produjo un “repunte de la inversión en inventarios privados y una aceleración de la inversión fija no residencial”, que contribuyeron a la aceleración del crecimiento del PIB, ésta se vio contrarrestada en parte por la caída de las exportaciones así como del gasto público, se indicó.
Otros analistas creen que Estados Unidos puede vivir una recesión leve en la segunda mitad del año. Aunque esta perspectiva parece estar disminuyendo ante los datos de un fuerte mercado laboral, el bajo desempleo y el gasto sostenido de los hogares, a medida que la inflación baja.
El miércoles el jefe de la Fed, Jerome Powell, dijo a la prensa que su personal ya no prevé una recesión, pese a que aún proyecta “una desaceleración notable del crecimiento a partir de finales del año”. La inflación está en 3% anual.w