Sáenz convoca a gobernadores para acercarse al Gobierno
Mientras Javier Milei intensifica sus críticas a los gobernadores a los que acusa de “traidores” por el fracaso de la Ley Ómnibus y avanza en la eliminación de fondos fiduciarios y subsidios, algunos mandatarios provinciales intentan tender puentes con un sector del Gobierno. “Quieren soluciones”, explican en el entorno del ejecutivo salteño Gustavo Sáenz, que organiza una reunión con algunos de sus pares y el ministro del Interior Guillermo Francos.
El gobernador salteño, que había sido uno de los primeros en reunirse con el jefe de Estado antes de su asunción, fue uno de los más apuntados por Milei, que -como represalia por el voto de sus diputadosdecidió echar a la secretaria de Minería, Flavia Royón, oriunda de la provincia norteña.
El jueves, antes de explorar una tregua, Sáenz tensó el vínculo al contestar las acusaciones del Presidente. “No nos vamos a arrodillar ante nadie, nunca. Solo ante Dios. (…) Acá no hay traidores ni mentirosos, disparó. En su discurso -difundido por dirigentes del Frente Renovador- el mandatario se quejó por las asimetrías en el precio del transporte y por la falta de obras públicas.
A pesar del enojo público y de que su provincia recibió en lo que va del año $17 mil millones menos que 2023, el ex candidato a vicepresidente de Sergio Massa en 2015 motoriza para este martes un nuevo puente con el Ejecutivo nacional y gobernadores del norte. Sáenz organiza un encuentro en su provincia con el ministro del Interior en el que se hablará de gestión, pero que busca sobre todo poner paños fríos en la negociación con el gobierno de cara al futuro. Sus pares de Catamarca, Raúl Jalil; y de Misiones, Hugo Passalacqua; ya confirmaron su presencia en en encuentro posterior a la conmemoración de la batalla de Salta de 1813.
“Va a haber más estabilidad y va a ser más fácil bajar la inflación si hay acuerdo del gobierno con los gobernadores”, dijo a Clarín Jalil.
También se espera la presencia del tucumano Osvaldo Jaldo, que está en plena sintonía: ordenó a sus tres diputados que abandonaran el bloque de Unión por la Patria para crear uno nuevo: Independencia. A cambio, el Gobierno le prometió que no subirán las retenciones a la industria del limón ni se eliminará el régimen del azúcar.
Entre el resto de los gobernadores del norte hay diferencias. El riojano Ricardo Quintela es el crítico más furibundo de la gestión de Milei y recurrió a la Corte Suprema para voltear el Mega-DNU de desregulación de la economía. Nadie lo espera en Salta. Lo mismo ocurriría con el formoseño Gildo Insfrán, que no descarta competir con la presidencia del PJ. El santiagueño Gerardo Zamora, en cambio, tuvo gestos zigzagueantes con el oficialismo en el Congreso y coincidió con Milei en Roma.
Los mandatarios del norte lamentaron el naufragio de la ley ómnibus. Sobre todo por los cambios vinculados al régimen de minería. Por eso empujan la idea de que el Gobierno la divida en capítulos para tratarla en sesiones ordinarias. Varios lamentan que el maltrato del Presidente a los gobernadores entorpezca el vínculo y se quejan porque Milei no ve que los diputados ya no responden con la verticalidad de otras épocas.
“Bajar la inflación debe ser la prioridad nacional y de las provincias y para eso hay que bajar el déficit fiscal, cuasi fiscal y eliminar la emisión”, señaló Jalil, que pidió una reunión con el Presidente. Entre los mandatarios provinciales del norte toman nota de que su electorado se mantiene alineado con el predicamento de Milei.
Los gobernadores radicales Gustavo Valdés, de Corrientes; y Leandro Zdero, de Chaco, podrían sumarse al convite con Francos. ■
A Salta irán Pasalaqua, de Misiones, y Jalil, de Catamarca