Una reunión clave para calmar la tensión por la interna en Red Bull
Horner, el jefe de equipo que está en la mira, charló con el representante de Verstappen. El sábado se corre el segundo Gran Premio del año en la F1.
A pocos días del Gran Premio de Arabia Saudita, en Red Bull intentan poner la casa en orden. Dubai fue el escenario escogido por el jefe británico de la escudería austríaca, Christian Horner, para una reunión con el representante de Max Verstappen, Raymond Vermeulen, con el objetivo de recuperar la calma y superar las crecientes tensiones en el interior del mejor equipo de la Fórmula 1.
Tras la consagración de su hijo en Bahrein, Jos Verstappen había desatado un escándalo cuando dijo: "Aquí hay tensión mientras Horner permanezca en su posición. El equipo corre peligro de desintegrarse. No puede seguir como está. Explotará. Se está haciendo la víctima, cuando es él quien causa los problemas”.
Fue su opinión tras el escándalo que enfrentó Horner por una denuncia de una empleada de Red Bull por “conducta inapropiada”. La investigación interna se cerró desestimando la acusación, pero dejó evidentes asperezas entre los accionistas de la compañía. En respuesta a los comentarios de Verstappen, un portavoz de Red Bull señaló: “Aquí no hay problemas. El equipo está unido y estamos centrados en competir”.
Según aseguran medios ingleses, el tono de la reunión entre Horner y el representante del tricampeón se manejó bastante bien. Sin embargo, ni Jos ni Max estuvieron presentes, y fue Vermeulen quien actuó en nombre de la estrella.
Helmut Marko, hombre fuerte de Red Bull, teme por la salida de
Verstappen para 2025, cuando Mercedes se quede sin Lewis Hamilton (se va a Ferrari) y tenga que buscar reemplazante.
El medio especializado Auto Motor und Sport da cuenta del temor que genera en Austria la posible partida del diseñador estrella, Adrian Newey, y de las dudas que los episodios extradeportivos despertaron en Ford Performance, el equipo de carreras de la automotriz norteamericana que se asociará con RB Racing a partir de 2026.
La incertidumbre es enorme, aunque Red Bull, Horner y Verstappen tienen una gran certeza: el RB20 está listo para salir a la pista y hacer lo que mejor sabe. Este fin de semana se correrá el Gran Premio de Arabia Saudita y el tricampeón es amplio favorito para repetir lo obtenido hace unos días en Bahrein. El ruido de los motores promete tapar el escándalo, al menos por un rato.
Porque a nadie le pasó inadvertido que en el cumpleaños de Jos Verstappen estuvo invitado Marko pero no Horner. Fiestas son fiestas y cada uno elige quién va.
Jos, el padre de Max, no invitó a Horner a su fiesta de cumpleaños.