Aumenta la posibilidad de que Julian Assange sea liberado
El fundador de WikiLeaks, el australiano Julian Assange, podría no sólo no ser extraditado a Estados Unidos desde Gran Bretaña sino que el gobierno norteamericano retiraría los cargos en su contra, que lo podrían condenar a cadena perpetua.
La presión de Australia -país de nacimiento del hacker-, de los organismos de derechos humanos, de su esposa y abogada sobre la vulnerabilidad de Assange han influido. Su estado de salud es tal que no puede concurrir a las audiencias en Londres, donde se encuentra detenido en la rigurosa prisión de Belmarsh. Su esposa Stella cree que puede morir en prisión. Ambos tienen dos hijos, concebidos cuando él estaba asilado en la embajada de Ecuador en Londres.
El presidente norteamericano Joe Biden dijo el miércoles que “estaba considerando” una solicitud de Australia para abandonar el intento estadounidense de una década de procesar al fundador de WikiLeaks por publicar un tesoro de documentos clasificados estadounidenses.
Durante años, Australia ha pedido a Estados Unidos que retire su procesamiento contra Assange. Un ciudadano australiano, que ha luchado contra los esfuerzos de extradición estadounidenses desde una prisión en el Reino Unido. Cuando se le preguntó sobre la solicitud el miércoles, mientras recibía al primer ministro japonés, Fumio Kishida, en una visita oficial, Joe Biden dijo: “Lo estamos considerando”.
Los fiscales estadounidenses dicen que el fundador de WikiLeaks alentó y ayudó al soldado Chelsea Manning a robar archivos clasificados antes de publicarlos.
El comentario de Biden es el último indicio de que su administración puede haber enfriado la idea de llevar a Assange a juicio, lo que podría resultar políticamente tóxico en un año electoral.
El mes pasado, The Wall Street Journal informó que la administración Biden “estaba explorando la posibilidad” de permitir que el fundador de WikiLeaks llegara a un acuerdo de culpabilidad, que le permitiría admitir un delito menor de mal manejo de documentos clasificados, a cambio de una liberación anticipada.
El primer ministro australiano, Anthony Albanese, afirmó el jueves que los comentarios de Biden eran “ciertamente alentadores. Soy cada vez más optimista acerca de un resultado. Pero ciertamente aún no se ha logrado”, dijo Albanese a Sky News Australia. “Seguiremos defendiendo el caso en cada oportunidad que tengamos”. ■