Enzo Fernández puso a Argentina primero y se operó
Es un riesgo deportivo, pero la salud está primero. Ese fue el argumento que probablemente haya pensado Enzo Fernández cuando decidió operarse ayer por el dolor que desde hace un tiempo le provocaba una hernia inguinal y que lo obligará a realizar una recuperación contra reloj si pretende estar a disposición de Lionel Scaloni para la Selección argentina en la Copa América 2024. O, quizá, también piensa en apuntarles a los Juegos Olímpicos de París 2024, donde la edad le permitiría no ocupar uno de los tres lugares como “mayor”.
La confirmación de la operación, paradójicamente, no la dio primero su club, Chelsea, sino la esposa de Fernández, Valentina Cervantes, que compartió una historia en la que se ve al futbolista acostado en una cama de una clínica esperando la intervención.
“Vamos amor”, escribió la madre de Olivia y Benjamín junto a un emoji de un corazón.
Más tarde el club londinense emitió un comunicado en las redes sociales en el que detalló la condición del volante. “Enzo Fernández fue operado hoy con éxito de un problema en la ingle y ahora comenzará un período de rehabilitación lo que lo dejará afuera de las canchas para lo que resta de la temporada 2023/24 del Chelsea”, publicó la cuenta oficial en español.
Ya había habido rumores sobre el físico del futbolista de 23 años, que de todas formas sólo se perdió cinco partidos en el año. Cuatro fueron por la Liga Premier y uno por la Copa FA (la victoria sobre Leicester en los cuartos de final).
Ya se había perdido dos encuentros entre la celebración de Navidad y Año Nuevo (Wolverhampton y Crystal Palace), lo que obligó al entrenador Mauricio Pochettino a referirse a la lesión. Más allá de esas declaraciones del 19 de diciembre, Enzo Fernández se retiró con lágrimas en los ojos después de pedir el cambio a los 30 minutos de juego y ver desde la tribuna el triunfazo por penales (4-2) sobre Newcastle, que en ese momento le permitió a Chelsea avanzar a las semifinales de la Copa de la Liga.
¿Cómo hizo para aguantar? Jugó infiltrado en varios partidos, lo que obviamente le producía un mayor dolor posteriormente. Intentó de todo. Un kinesiólogo argentino que suele trabajar con él se fue a Londres a monitorearlo de cerca y tratar la lesión.
Sin embargo el dolor permaneció y tras la consulta entre los cuerpos médicos de la Selección y Chelsea se decidió que lo mejor para su futuro deportivo era la operación.
Ahora el foco está puesto primero en la Copa América para la que faltan dos meses. Para la Selección campeona del mundo comenzará el 20 de junio en Atlanta contra Canadá. En condiciones normales el postoperatorio y la recuperación sería de dos a cuatro semanas, pero también habrá que tener en cuenta la puesta a punto futbolística que necesitará.
Scaloni lo tiene siempre como una alternativa para conformar el triángulo del mediocampo, uno de los más ponderados por el mundo del fútbol que integra junto a Rodrigo de Paul, Alexis Mac Allister y Giovani lo Celso. ■