Himalaya, el nuevo desafío del inglés que voló desde el Aconcagua
Tim Howell había hecho historia en los Andes, al lanzarse con un traje con alas en 2022. Ahora busca repetir la hazaña y superar otro récord mundial.
El británico Tim Howell sigue buscando récords mundiales en deportes extremos. Ya llegó a la cordillera del Himalaya, en Nepal, para intentar el primer salto de alas por encima de los 8 mil metros.
El ex miembro de la Armada Británica quiere ser el primer escalador que logra saltar miles de metros, hasta desplegar un paracaídas, desde el cerro Lhotse, de 8.516 metros sobre el nivel del mar.
Howell estuvo en Argentina en diciembre de 2022 y logró realizar el salto y vuelo en su traje de alas desde un campamento de altura del Aconcagua (6.962 metros). Howell ascendió por la ruta normal del Lhotse, que, en su primera mitad, comparte la ruta del Everest (8.848 metros), la montaña más alta del mundo, al sur de Tíbet (China) y la región de Khumbu (Nepal).
Lhotse es la cuarta montaña más alta del mundo, por debajo del Everest, el K2 y el Kangchenjunga. Su nombre significa “pico sur” en tibetano. Además de la cumbre principal (8.516 metros) cuenta con los picos Lhotse Medio (8.414 metros) y Lhotse Shar (8.383 metros). Howell ya se lanzó desde el Gran Cañón del Colorado y Seis Caras Norte de los Alpes (Eiger, Cervino, Tre Cime di Lavaredo, Grandes Jorasses, Dru y Piz Badile). En sus redes sociales @tim_hoewll_adventure se vio el camino hacia la cumbre del Lhotse. La expedición pasó a los pies del Everest a través de la Cascada de Hielo del Khumbu.
Ahora espera cuatro días de aclimatación en el campamento base, hasta que su equipo fije las cuerdas en la ruta del Lhotse para lanzarse a los campamentos de altura. Según describió en su perfil de Intagram, “nuestro punto más alto fue debajo del Campo 3, donde abandonamos debido a la caída de rocas. Fue una gran sensación. Estar en lo alto se siente como los Alpes, pero todo está en otra escala. Tenemos pocos días de descanso hasta que se arreglen las cuerdas. El pronóstico pinta bien”. Cuando suba los últimos metros del Lhose usará oxígeno suplementario, como la mayoría de los escaladores que superan los 7 mil metros de altura. Pero no llevará oxígeno suplementario en el vuelo de descenso.
El deportista británico quiere superar el récord de su colega ruso Valery Rozov, quien en 2016 logró hacer el salto en traje de alas desde 7.700 metros de altura en el Cho Oyu. Voló hasta un glaciar y aterrizó con su paracaídas a 6.600 metros. En 2013, Rozov había saltado desde 7.220 metros en la cara norte del Everest. Su pasión por este deporte de riesgo terminó con su
vida. El deportista ruso murió en 2017, en un salto en traje de alas en el Ama Dablam (6.812 m) en Nepal.
Howell fue noticia el 29 de diciembre de 2022 en su paso por Argentina. Había llegado al país para ascender el Aconcagua y, en medio de esa excursión, decidió saltar desde unos 5.500 metros y descender con capa y paracaídas hasta los 5 mil metros en tres minutos. Para Howell, el vuelo en traje de alas era un objetivo secundario. Pretendía ascender el Aconcagua, pero, por las adversas condiciones de tiempo, no pudo alcanzar la cima. Una parte del descenso desde Nido de Cóndores, a 5.500 metros de altura, lo hizo volando con capa.■