Seinfeld debuta como director con una comedia sobre cereales Kellogg’s
Está ambientada en los ‘60, cuando esa marca peleaba por imponerse. Actúan el propio Seinfeld, Hugh Grant, Melissa McCarthy y gran elenco.
“Sin glasear” •••◦◦ Buena
Comedia. EE.UU., 2024. Título original: Unfrosted. 93’, SAM 13. De: Jerry Seinfeld. Con: Seinfeld, Melissa McCarthy, Hugh Grant, Amy Shumer, Christian Slater, Peter Dinklage, Jon Hamm. Disponible en: Netflix.
Tal vez sólo los fans de Jerry Seinfeld, veterano del stand up, recuerdan el chiste sobre las Pop-Tarts de Kellogg’s. Bueno, el origen de las Pop-Tarts es esta película, Sin glasear, una comedia absurda y plagada de estrellas, que cuenta cómo Kellogg’s ganó la batalla de los cereales.
Para este, su debut como director de largometraje, Jerry redactó el guion con sus habituales colaboradores de Seinfeld (para muchos, la mejor sitcom de la historia televisiva) y Bee Movie, y se ve que todos se pusieron una regla: rodear a la estrella de personajes memorables, como sucedía en la serie Seinfeld.
El es Bob Cabana, alto ejecutivo de Kellogg’s durante los años ’60, que es donde se sitúa la comedia. Con su jefe, Edsel Kellogg III (Jim Gaffigan), están preocupados por lo que la compañía adversaria, presidida por Marjorie Post (Amy Schumer) prepara para irrumpir en el mercado del desayuno.
En la vereda de enfrente, casi literalmente, están la fábrica y las oficinas de Post. Hoy puede parecer normal, pero que en los años ’60 en los Estados Unidos una compañía fuera dirigida por una mujer no era para nada usual.
El campo de batalla es en Battle Creek, Michigan, y hay que moverse rápido y lanzar una innovación cercana a los cereales y la leche, para lo que Bob llama a su antigua socia, Donna Stankowski (Melissa McCarthy), que está trabajando para… la NASA, preparando astronautas para ir a la luna.
Lo llamativo es el elenco que consiguió reunir Seinfeld, así fuera en pequeños cameos. Es un guiño acertado que Jon Hamm, de Mad Men, la serie sobre el negocio de las agencias de publicidad, ayude a publicitar el nuevo producto.
Se destaca, cómo no, Hugh Grant, como un amargado actor británico de Shakespeare que, disfrazado, interpreta a Tony el Tigre en las publicidades y en la cajita de cereales, y cuando lo desplacen a él y a las otras “mascotas de la marca”, intentará liderar la revuelta con sus compañeros.
También, como miembros de un sindicato de leche organizada, están Christian Slater y Peter Dinklage, y hay un par de chicos que bucean en contenedores de basura (Bailey Sheetz y Eleanor Sweeney) y que son otro de los atractivos del filme, plagado de escenas absurdas.
Jerry Seinfeld, aunque su personaje se llame Bob Cabana, sigue interpretando a Jerry.
Las películas o series sobre el origen de los negocios están de moda, arrancando con McDonald’s y siguiendo con las zapatillas Air de Nike, Tetris o BlackBerry y similares. Y cliqueen en los créditos finales, cuando la plataforma les sugiera terminar de ver el filme y pasar a ver algún trailer, porque hay sorpresas. Lo que diferencia a Sin glasear del resto es el sarcasmo.
No hay por qué saberlo, pero el Cabana de Seinfeld estaría ligeramente inspirado en William Post (el apellido de la marca rival). Y como esto es una ficción, vale que Post haya sido en la vida real el gerente de planta de Hekman Biscuit, una empresa de galletas para la que trabajó y al que Kellogg’s se acercó para crear las Pop-Tarts, una suerte de pastel para calentar en una tostadora.
Pero también existió Charles William Post, pionero en la fabricación de cereales y alimentos para el desayuno, y fundador de Post Consumer Brands.
Pero esto es una broma, una sátira, una película.