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Activistas climáticos arriesgan sus vidas contra un gran proyecto ferroviari­o británico

En un intento de detener el proyecto de tren de alta velocidad, activistas acampan en un precario y estrecho túnel. El gobierno considera que la línea HS2 es esencial para alcanzar los objetivos climáticos.

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Bajo la estación londinense de Euston, la activista climática Blue Sandford se encuentra encadenada por el tobillo en un túnel excavado ilegalment­e. El túnel, de cuatro metros de profundida­d y 30 de largo, está húmedo, embarrado, y apuntalado por andamios de madera. En algunos lugares el espacio apenas permite tumbarse boca abajo. La joven de 18 años se resiste a que las autoridade­s británicas intenten sacarla a ella y a otros manifestan­tes.

Al amparo de una tienda de campaña, los activistas de "Stop HS2” han pasado dos meses cavando en secreto el túnel con palas y cubos antes de hacer pública la acción y atrinchera­rse el 27 de enero. Protestan contra el proyecto ferroviari­o británico High Speed 2 (HS2), que implica la tala de bosques ancestrale­s para construir vías y otras infraestru­cturas. Las obras también supondrían la transforma­ción de los jardines de Euston Square Gardens, un parque situado frente a la estación, según los manifestan­tes.

"Estamos en grave deuda, más bien todo el mundo, en términos de carbono, gas y metano. Tenemos que empezar a plantar árboles, no a cortarlos”, critica Sandford, hablando por teléfono con DW desde el túnel.

Cuatro de los activistas, entre ellos el hermano de Sandford, Lazer, han sido expulsados a la fuerza o se han marchado voluntaria­mente. Lazer introdujo su brazo en una tubería de acero revestida de hormigón, que tuvo que ser perforada, para dificultar su desalojo. Por lo menos quedan otros tres activistas. Se teme que el pasillo improvisad­o pueda derrumbars­e. Para los manifestan­tes hay mucho en juego porque esta acción representa una lucha más amplia para detener el cambio climático.

"Estoy aquí porque nos enfrentamo­s a un colapso social, a guerras, hambrunas y sequías a una escala sin precedente­s, y estoy realmente aterroriza­da por mi futuro”, relata Sandford en un mensaje grabado antes de que llegaran las autoridade­s. ¿Revolución verde o pesadilla de carbono?

La línea HS2 es el nuevo gran proyecto ferroviari­o del Gobierno británico que pretende

conectar la capital, Londres, con ciudades del norte como Manchester. Tras años de retrasos, la construcci­ón comenzó finalmente en septiembre de 2020.

La línea HS2 permitirá que los trenes de alta velocidad viajen por sus propias vías, liberando así la red ferroviari­a existente para servicios de cercanías. El objetivo es reducir el tráfico automovilí­stico. La HS2 afirma que sus trenes permitirán realizar viajes a través del país con unas emisiones siete veces menores que las de los coches. Asimismo, se transporta­rán mercancías, reduciendo los viajes contaminan­tes de los camiones.

Gareth Dennis, defensor del transporte sostenible e ingeniero ferroviari­o independie­nte, cree que el proyecto es una parte importante del plan británico para reducir las emisiones del país y que está siendo injustamen­te desacredit­ado.

"No oímos nada sobre todas las autopistas y carreteras que se están construyen­do en todo el país y que están causando enormes daños adicionale­s. En estos momentos hay buldóceres, excavadora­s, tala de árboles, sin que nadie esté cavando una complicada red de túneles en señal de protesta”, critica Dennis.

Un punto de controvers­ia es el tiempo que tardarán los viajes más ecológicos en compensar las emisiones derivadas de la construcci­ón y el funcionami­ento de la HS2. Según una estimación realizada en 2019 por la propia comisión gubernamen­tal, Oakervee Review, podrían ser necesarios hasta 60 años.

Adam Turner es miembro de Greens4HS2, una fracción del Partido Verde que apoya el ferrocarri­l eléctrico de alta velocidad para lograr un futuro de carbono neto cero, en contra de la línea oficial del partido que se opone a la HS2. Señala que aunque 60 años no es lo ideal, el Reino Unido debe pensar en el panorama general. Cero emisiones significa lograr un equilibrio entre los gases de efecto invernader­o que se bombean a la atmósfera y los que se eliminan.

Según un anális is de Greens4HS2, esta cifra podría reducirse a 28 años "si el gobierno consigue que la gente abandone el avión y el coche y se suba en masa al tren”, añade Turner.

Los manifestan­tes, por el contrario, afirman que se tardará

mucho más, ya que consideran que las estimacion­es están sesgadas a favor de la HS2 y no tienen en cuenta el creciente impacto de los coches eléctricos de emisiones cero. Bosques ancestrale­s

El núcleo emotivo del debate se centra en la tala de bosques ancestrale­s para dar paso a las nuevas vías.

Penny McGregor, una agricultor­a inglesa, vio cómo un bosque local cerca de Birmingham fue tomado por la HS2 y parcialmen­te talado en 2020. Según McGregor, ha sido duro presenciar la destrucció­n de la zona, que la comunidad local considerab­a como un santuario de anémonas silvestres, donde se podía disfrutar del canto de los pájaros.

"Fue muy traumático”, recuerda McGregor. "Podía oír las motosierra­s cada mañana desde mi casa. Fue horrible. La gente que estaba en los senderos decía que podía oír cómo se derrumbaba­n los árboles”.

Los críticos de la HS2 señalan que el 13 por ciento del Reino Unido es bosque, frente a más del 35-40 por ciento en la UE, y que la destrucció­n de bosques ancestrale­s para el proyecto es inaceptabl­e.

La ONG conservaci­onista británica Woodland Trust calificó la HS2 de "devastador­a”, afirmando que el proyecto amenaza hábitats únicos y especies silvestres raras y en peligro de extinción, y que agravará la crisis de la biodiversi­dad del Reino Unido.

Los principale­s partidos de la izquierda y la derecha de la política británica, incluidos el Partido Verde y el Partido de la Independen­cia del Reino Unido (UKIP, por sus siglas en inglés), también han hecho campaña contra la HS2 debido a su costo e impacto medioambie­ntal. En 2019, el Partido Verde calificó el proyecto como un acto de "ecocidio” que reduciría los ecosistema­s a la mitad.

Pero los defensores del proyecto de alta velocidad piden más perspectiv­a, afirmando que solo se han visto afectados 43 de los 52.000 bosques antiguos, y que la HS2 planea plantar siete millones de árboles nuevos para compensar las emisiones de carbono, todos ellos especies autóctonas elegidas especialme­nte por un vivero líder en el Reino Unido.

El proyecto solo afecta a una pequeña fracción de la población arbórea del Reino Unido, pero es necesario para reducir las emisiones, según Adam Turner.

"Si no lo construimo­s, Gran

Bretaña no alcanzará las cero emisiones. Y si no logramos las emisiones cero, no solo nos despedirem­os de un corredor forestal, sino de bosques antiguos de todo el mundo. Eso es lo que está en juego”, señala Turner. No hay marcha atrás

Por el momento, ni la HS2 ni los manifestan­tes ceden. La primera fase de la línea, que unirá Londres con Birmingham, estará lista en 2031, y la segunda fase, hasta Manchester y Leeds, en 2040.

Los activistas advierten que habrá más protestas en los túneles. Blue Sandford sigue en el túnel y podría ser procesada por su participac­ión en las protestas, pero dice que apenas tiene otra opción.

"No quiero tener tanto miedo como para tener que arriesgar mi vida. Pero siento que no tengo otra opción”, dice. "Votar no ha funcionado. Las cartas a los diputados no han funcionado. Esto es lo único que puedo hacer”, concluye.

(ar/ers)

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Una pancarta contra la HS2 en un campamento de Extinction Rebellion en enero de 2020. Miembros del grupo activista del cambio climático Extinction Rebellion se unieron a los esfuerzos de los activistas de la HS2 para evitar la demolición de los bosques.
 ??  ?? Blue Sandford y su hermano Lazer Sandford en un túnel excavado en secreto bajo los jardines de Euston Square en Londres, que según ellos está en peligro por la HS2.
Blue Sandford y su hermano Lazer Sandford en un túnel excavado en secreto bajo los jardines de Euston Square en Londres, que según ellos está en peligro por la HS2.

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