El proceso de cura y rehabilitación
Actualmente, el Parque Faunístico alberga alrededor de 1.300 animales de 190 especies. Cuenta con un equipo de casi 50 personas que se desempeñan en diferentes tareas que se basan en cuatro pilares fundamentales: conservación, investigación, educación y recreación responsable. Cynthia González, médica veterinaria del Faunístico, contó a DIARIO HUARPE que de los cientos de animales de diferentes especies que ingresan por año al Faunístico, un 10% llega muerto, un 20% muere a los 30 días y el resto son recuperados; y los que están aptos, reinsertados al ambiente.
“Lo primero que hacemos cuando llega un cóndor o cualquier otro animal al parque es evaluar si puede o no rehabilitarse a su hábitat natural”, contó Cynthia. “Hacemos todos los exámenes médicos de rutina, como extracción de sangre; radiografías; y si el cuadro lo requiere, hacemos intervenciones quirúrgicas. En fin, todo lo que tenga que ver y esté relacionado con mejorar la salud del animal y descartar todas las condiciones que puedan influir negativamente en su posterior liberación”.
La médica veterinaria explicó que superado el proceso de recuperación física comienzan con los trabajos y estudios psíquicos y comportamentales del animal. Es decir, cómo desarrolla sus aptitudes (en el caso del cóndor, por ejemplo cómo vuela), cuáles son sus reacciones e instintos, la relación que establecen con sus pares, entre otros parámetros que van indicando el progreso para la futura liberación.
“Fue en el mes de abril cuando les hicimos a los tres cóndores los últimos chequeos médicos y los resultados no indicaron que los tres ya estaban listos y preparados para volver a su hábitat natural”, dijo.