Después del stand-by, el FMI evalúa volver a tener oficinas en Buenos Aires
En septiembre se hará la primera revisión de la economía argentina. Lagarde llegará a Buenos Aires el viernes próximo. Estará tres días, para participar de una cumbre del G20
LA ANTERIOR LA HABÍAN CERRADO EN 2012, CUANDO NO HABÍA CASI RELACIÓN
El regreso al Fondo Monetario Internacional en búsqueda de asistencia financiera, tras más de 12 años desde que se cancelaron los u$s 9500 millones del préstamo a anterior, puede concretarse con la reapertura de una oficina en Buenos Aires. Una dependencia del organismo existió durante varios años en la Argentina y luego, con poca relación con el FMI, fue cerrada en 2012.
De acuerdo con lo pactado con el Fondo, los técnicos harán revisiones trimestrales de la evolución de la economía argentina. Sin embargo, la frecuencia de algunos monitoreos es semanal y hasta diaria de determinadas variables. Por ahora, todo se supervisa desde Washington, pero no se descarta abrir una oficina en Buenos Aires.
“Aún no se definió”, respondió una fuente del Fondo Monetario frente a la consulta de la apertura de una oficina en Buenos Aires. “El FMI como el Banco Mundial tienen representación en varios países”, agregó, y ejemplificó: “En Brasil tenemos una; ayuda con la fluidez del diálogo y la información”.
El FMI decidió en marzo de 2012 cerrar su oficina en el microcentro porteño en el medio de un contexto en el que la crisis internacional implicó reorientar recursos a países con los que el Fondo tenía programas, como con Europa, pero claramente ya no era el caso argentino. Incluso, años antes, en los ’90, habían mantenido una dependencia dentro del edificio del Banco Central.
La primera revisión de la economía argentina la hará el FMI el 20 de septiembre. No obstante, antes de esa fecha, la directora gerente del organismo, Christine Lagarde, volverá a pisar suelo porteño por segunda vez en el año la próxima semana, en el marco de la reunión de Ministros de Finanzas y presidentes de Bancos Centrales del G20, que es el 20 y 21 de julio. Llegará el viernes a Buenos Aires y se quedará hasta el domingo, día que termina el encuentro.
También vendrá el número dos del FMI, David Lipton, para formar parte del equipo del Fondo que se focaliza en temas del G20, y estará en las reuniones de los “deputies”, que serán el 19 y 20 de julio. Estas visitas fueron confirmadas ayer por el vocero principal del FMI, Gerry Rice, en una conferencia de prensa. No obstante, aún no se terminó de definir la agenda de Lagarde. Se estima que se volverá a encontrar con Mauricio Macri, tal como lo hizo en Canadá en junio, y que también lo hará con Nicolás Dujovne y con el presidente del BCRA, Luis Caputo.
La vez anterior que vino Lagarde fue en marzo, también para una reunión del G20. Fue la primera que hacía el número uno del organismo al país en poco más de 10 años. En diciembre de 2007, el entonces director gerente, Dominique Strauss Kahn, vino a la Argentina y se reunió con Cristina Fernández de Kirchner. El encuentro fue tras el pago de una vez de los u$s 9500 millones que se adeudaban al organismo a fines de 2005, con los que el Gobierno había buscado tomar distancia del FMI, dentro de la cual se prohibió la realización de revisiones de la economía argentina.
Tras el reestablecimiento del vínculo, ya en el gobierno macrista, en 2016 hubo una primera misión del FMI en el país: técnicos del organismo, liderados por el italiano Roberto Cardarelli, se reunieron en esa oportunidad (y luego también en 2017) con funcionarios, economistas, empresarios y académicos para elaborar el primer informe sobre la economía argentina, conocida como “revisión del Artículo IV”, uno de los requisitos para los miembros del organismo internacional.
Según se plasmó en el memorándum de entendimiento con el Fondo, el préstamo por u$s 50.000 millones en un programa de 36 meses con la Argentina implica, además de revisiones trimestrales, que el organismo monitoree de manera diaria el valor del dólar, las tasas de interés de instrumentos de deuda doméstica (como de las Letes, Lebac y Botes) y el total de dinero emitido por el BCRA, entre otros.