Vidal da aire a intendentes en el año electoral: mantiene el cobro de tasas con los servicios
Los jefes comunales podrán subir tributos municipales hasta un 38%. También continuará el ingreso de fondos atado a la mayor cobrabilidad de facturas de servicios
La gobernadora de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, resolvió postergar un pedido del presidente Mauricio Macri y le dio oxígeno financiero a los 135 intendentes para afrontar un 2019 en el que deben asumir el costo de los subsidios al transporte y el desafío de las elecciones. Así, aplazó por seis meses la medida que les prohibía a los municipios cobrar en las boletas de luz tasas ajenas al servicio eléctrico. En muchas de esas boletas aparecen tasas que de ir por separado tendrían una alta morosidad.
Comienza el año electoral, y mientras la gobernadora de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, sigue jugando al secreto respecto si desliga o no las elecciones provinciales de las presidenciales (ver página 3), sí definió aplazar un pedido del presidente Mauricio Macri y le dio oxígeno financiero a los 135 intendentes que deberán afrontar un 2019 con mayores gastos.
Mediante una resolución publicada el día posterior a Reyes, la administración provincial aplazó por seis meses una medida que les prohibía a los municipios cobrar en las boletas de luz tasas ajenas al servicio eléctrico. Esta prohibición había sido reclamada por Macri, quien hasta firmó una resolución, la 3442/2018, estableciendo
que las cooperativas proveedoras del servicio de energía -200 en la provincia- debían facturar el servicio de forma autónoma a otros impuestos. Buscaba desenganchar la evolución de los precios de los servicios de la recaudación de los distritos.
“La nueva fecha que fue publicada por el Organismo de Control de Energía Eléctrica de la Provincia de Buenos Aires (Oceba) fue algo que se acordó con todos
los intendentes cuando se discutió el presupuesto provincial. Pero, en realidad, la continuidad fue solicitada por todos los jefes comunales de la provincia, que alegaron que necesitaba más tiempo para organizar los sistemas de cobro”, explicaron fuentes provinciales a El Cronista.
La Oceba había dictado Resolución Nº 0167/18 donde daba curso al pedido de Macri y establecía que los distribuidores provinciales
y municipales, no podrán incorporar en su facturación, conceptos ajenos a la prestación del servicio público de distribución de energía eléctrica ni conceptos adicionales vinculados al servicio público de distribución de energía eléctrica, sin la previa aprobación de ese Organismo. Con la nueva resolución establece que “en el entendimiento que el cumplimiento de la medida implica para los Municipios modificaciones en sus sistemas de recaudación y cobro establecer el 1º de julio de 2019, como la fecha de efectiva aplicación”.
Los intendentes fueron a La Plata a pedir más plazo porque, dicen, necesitan adaptar los sistemas para poder recaudar adecuadamente. En realidad, lo que ocurre es que en muchas de las boletas de servicios se “esconden” tasas que de ir por separado tendrían una alta morosidad. “Las boletas de luz tiene un cobro de 95% mientras que una tasa municipal está en torno al 55%” explicó un conocedor del tema. Los municipios utilizan las boletas de luz y otros servicios como un “reaseguro” para cobrar servicios locales, lo que provoca que las facturas varíen mucho según los distritos.
Esto le generará aire a los jefes comunales que deberán decidir entre la suba del boleto de transporte o pagar más de subsidios ya que desde el 1° de enero pasó a ser completa responsabilidad de los municipios. “No podían pasarle todo junto, hay municipios que no aguantan”, señala un político que camina la provincia.
La situación financiera de los
135 municipios bonaerense presenta realidades diferentes pero que se pueden agrupar en tres grandes grupos. Los que están en rojo continuamente, como puede ser Mar del Plata, Berisso y San Pedro, otro grupo de quince intendencias que fueron los que tuvieron que pedir ayuda a la provincia que se tradujo en
La provincia avalará suba de tasas de hasta 38% en línea con el impuesto inmobiliario y el agua
adelantos de coparticipación o refinanciación de deudas durante el 2018 y el resto que se mantiene por arriba de la línea de flotación. Con esta extensión los municipios podrán mantener el cobro de tasas en las facturas de servicios y evitar un fuerte desplome de la recaudación mientras se negocian los aumentos de tasas.
Respecto de este punto, en la negociación que se llevó adelante entre el oficialismo provincial y la oposición por el Presupuesto 2019 la administración Cambiemos había propuesto poner un tope de 38% de aumento de las tasa municipales. “Eso cayó en las negociaciones propias de la ley, pero ese es el número que nos gustaría”, reconocen en los pasillos de la casa de gobierno provincial. Reconocen que ese número de aumento es el que podría convalidar Vidal teniendo en cuenta que eso es lo que aprobó de alza para el impuesto inmobiliario y lo que propone de suba para el agua.
Con 135 municipios con realidades diferentes las subas son dispares pero, en algunos casos, superan las pretensiones de la administración provincial. Tantos es así que en las localidades más al sur de la provincia en algunos casos rozan el 60 por ciento.