Por la recesión, cae el uso de la capacidad instalada en fábricas

Se registró un fuerte retroceso en relación al 69,2% del mismo mes de 2017. Todavía hay capacidad ociosa para que la industria crezca, sin un nuevo ciclo de inversiones

La industria manufacturera sigue sin dar señales de recuperación. Con niveles de producción que mes a mes muestran contracción en casi todo el abanico de actividades industriales no sorprende que la utilización de la capacidad instalada (UCI) retrocedió un paso más. Pero nada menos que hasta la peor crisis económica del país: sólo en noviembre de 2002, con la industria en plena crisis post convertibilidad hubo niveles de utilización de la capacidad instalada debajo de ese registro.

Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) difundidos ayer, en noviembre de 2018 el porcentaje de uso del potencial productivo en los sectores manufactureros llegó a 63,3%, 1,5 punto porcentual menos que en octubre pasado y un retroceso bastante importante frente a los 69,2% alcanzado en noviembre de 2017.

Según datos del organismo estadístico oficial, entre los sectores con menor uso de su potencial de producción se encuentran la industria textil (43,9%) y el sector automotor (44,4%), que tuvo un fuerte retroceso en relación a noviembre de 2017 cuando la utilización de la capacidad instalada había llegado al 55 por ciento. En cuanto a la industria metalmecánica sin contar el bloque automotor (44,5%), se registró una importante caída de la producción de maquinaria agrícola y de bienes de consumo durables, en especial electrodomésticos.

También hubo una baja utilización en la industria de caucho y plástico (51,6%), impactada por la menor demanda de neumáticos y manufacturas de plásticos. El sector de minerales no metálicos, dominado por la producción de cemento portland, aún se mantiene con un nivel de 72,7%, bastante por encima del promedio de todo el entramado industrial pero mostrando un retroceso de más de ocho puntos porcentuales respecto de noviembre de 2017, cuando había alcanzado el 80,6% de uso de su potencial de producción.

Sólo se salvaron del bajón las industrias metálicas básicas, que empujadas por la fuerte demanda de aluminio y acero, especialmente para fabricación de tubos sin costura para la industria petrolera, lograron un nivel de 88,0% de la capacidad instalada. Por su parte, papel y cartón llegó a 76,1% y productos de tabaco, 74,6 por ciento.

“El dato de utilización de la capacidad instalada es consistente con la medición que dio el EMI del Indec de una baja del 13,3% en noviembre”, señaló Pablo Dragún, coordinador del Centro de Estudios de la Unión Industrial Argentina.

Pese a ello, Dragún estimó que “noviembre podría ser el piso pero no estoy seguro que pueda haber una recuperación muy fuerte” ´pero aclaró que por los primeros datos que se ven “diciembre tampoco va a ser bueno”.

Y sobre posibles nuevas inversiones, Dragún consideró que aún habrá que esperar, en un escenario con “tasas de interés elevadas, un dólar caro y un mercado interno deprimido”.