“Argentina tiene que abrirse e integrarse más al mundo”
Atacó las regulaciones al comercio, criticó el Impuesto sobre los Ingresos Brutos y apoyó las nuevas retenciones “de emergencia”. Aceptó que existe “riesgo político”
Jens Arnold, jefe de la sección Argentina/brasil del Departamento de Economía de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), consideró que los gobiernos de ambos países más que sostener el Mercosur deben abrirse al resto del mundo.
“Argentina no necesita ocultarse tras un muro de protección”, afirmó el economista senior y coordinador del área de América latina de la entidad. En una entrevista con El Cronista, Arnold dijo que no hay temor de un default por parte de la Argentina. -¿Cómo ve en la actualidad a la economía argentina?
-Uno de los grandes desafíos de Argentina es integrarse más al mundo. El comercio exterior de la Argentina es 30% del PBI. Es muy bajo incluso en comparación con países del mismo tamaño. Necesita importar más y exportar más. El comercio internacional es una oportunidad para crear nuevos puestos de trabajo, más productivos y mejor remunerados; para importar mejor tecnología, y para estar más expuestos a las presiones de los mercados internacionales, lo que lleva a las empresas a mejorar su productividad, que ha sido muy baja en la última década. -¿A qué lo atribuye?
-Hace falta la apertura del comercio al exterior, pero también internamente hay barreras a la competencia de productos. En la OCDE construimos un indicador que mide cuán restrictivas son las regulaciones de los mercados, y Argentina es de los más restrictivos. Es difícil entrar en un mercado, competir con los que ya están instalados y esto lleva a que no es el mejor productor el que puede llevarse la mejor parte del mercado. -¿Se debe a prebendas, impuestos, leyes laborales?
-Me refería a cuestiones regulatorias que impiden entrar a un mercado a competir. Pero la cuestión laboral es un tema a mirar en el futuro. También está el sistema impositivo que recauda de una manera más dañosa que necesaria. Por ejemplo, Ingresos Brutos crea incentivos para hacer todo adentro de la empresa, en vez de usar otras fuentes para los insumos cuando pueden producirlos en forma más barata. -¿Y las retenciones a las exportaciones que reinstaló el Gobierno?
-Fue una medida de emergencia porque había que hacer un esfuerzo especial para adelantar el ajuste fiscal. También debe verse en el contexto de la devaluacion; sólo toma una parte de esa devaluación. Fue una de las pocas medidas posibles en ese momento y siempre que caduque cuando está previsto, fue lo adecuado. -El riesgo país baja, pero es uno de los tres más altos de la región. ¿Hay temor a un default?
-La deuda pública argentina ha aumentado bastante este año debido a la depreciación de la moneda; alrededor del 30%, y llevó a la Argentina a niveles de deuda moderadamente altos. Pero nuestras proyecciones no ven un riesgo en la deuda argentina, si se cumple con lo acordado y se mantiene superávit fiscal más allá de 2020. -¿Qué se espera del gobierno de Bolsonaro en Brasil?
-Es un poco temprano para opinar, pero ha identificado algunos puntos de política económica que son una buena señal.
Dijo que el comercio internacional es una gran oportunidad y que hay que eliminar barreras internas
Reinstaurar las retenciones fue medida de emergencia. Si caduca cuando está previsto fue adecuado
-¿Cómo influirán esas políticas en Argentina?
-Tanto Argentina como Brasil se podrían beneficiar mucho de abrirse más al mundo y no mirar tanto el mercado del otro país. Se debe entender que el mundo es más grande que sólo el Mercosur y que una mayor apertura permitirá crear nuevos empleos y mejorar la productividad. -Macri es partidario de sostener el Mercosur.
-No se trata de sostener o no sostener el Mercosur. Lo importante es abrirse. Argentina necesita importar bienes de capital , por ejemplo, para los que tiene muy altos aranceles, y eso trae desventajas. Y también para los consumidores ; los precios en dólares son altos, fruto de la protección. Los más beneficiados con la apertura serían los deciles de menores ingresos. -Son también los que se quedarían sin trabajo cuando se cierren las fábricas a raíz de la importación…
-No comparto ese punto de vista. Habría un efecto transitorio, con puestos de trabajo que se pierdan pero habrá empleo en otros segmentos que van a surgir o crecer. Argentina no tiene por qué tener miedo y ocultarse tras de un muro de protección. Es cierto que habrá un costo de transición, por lo que habrá que diseñar políticas de protección social y de capacitación para los que se quedan sin empleo en un sector y deban insertarse en otro.