Argentina adeuda más de u$s 110 millones a distintos organismos internacionales
Es en concepto de membresía y participación en los más diversos foros multilaterales, entre ellos Naciones Unidas, que amenazó al Gobierno con vedarle el voto en la asamblea
Mientras la Casa Rosada y el Ministerio de Economía negocian con total sigilo la reestructuración de los compromisos de deuda por vencer en 2020, otras áreas del gobierno van descubriendo pasivos heredados de la gestión anterior. La Cancillería, por caso, el equipo que desembarcó el 10 de diciembre junto con el ministro Felipe Solá, identificó una “herencia” impaga de aproximadamente u$ s 150 millones en concepto de cuotas y contribuciones con organismos internacionales, que debieron cubrirse en parte con urgencia y hoy dejan un rojo de u$s 110 millones.
Según la auditoría encarada en la Secretaría de Coordinación y Planificación Exterior, que administra la “caja” del ministerio, la gestión de Macri dejó impagas las cuotas por membresía en organismos internacionales correspondientes a 2017, 2018 y 2019 a la vez que trabajos de dragado en los ríos de la Plata y Uruguay. Las cuotas en mora corresponden a organismos de la talla de la Organización de Naciones
Unidas (ONU) por u$s 51 millones y otros como la OMS (u$s 2,5 millones), la Organización Internacional de Trabajo (OIT, u$s 2,1 millones), FAO (u$s 3 millones), Unesco (u$s 1,6 millones), Migraciones (OIM, u$s
Solá acusó a Faurie de ocultar los pasivos, que responsabilizó por el rojo a la abrupta devaluación pos PASO
237.000) y la Corte Penal Internacional (CPI, € 6,7 millones).
Ante la falta de pagos, la subsecretaría general de la ONU envió el 4 de octubre una intimación al representante permanente del país ante ese organismo, Martín García Moritán, demandándole que el Gobierno efectúe el pago de unos u$s 106 millones, o bien haga frente a un mínimo equivalente a u$s 17 millones. Caso contrario, la Argentina podría perder su voz y voto en la asamblea.
En la transición, el ministro Jorge Faurie puso al corriente de la deuda habida con Naciones Unidas y por los dragados, lo cual motivaron que el 30 de diciembre pasado la Jefatura de Gabinete reasignara partidas por cerca de u$s 40 millones para empezar a reducir la deuda. Eso deja el pasivo en u$s 110 millones. Pero no hubo detalles respecto a los otros organismos, lo que molestó a la conducción entrante.
Cerca del exministro y diplomático de carrera explicaron que los compromisos se pagan mayoritariamente en dólares o en la moneda del país donde el organismo está radicado, con lo cual cada variación del tipo de cambio afecta el esquema de pagos. Tras la victoria de Fernández en agosto y la abrupta devaluación, la cartera necesitó nuevas partidas demandadas a Hacienda, que bajo la administración de Nicolás Dujovne primero, y Hernán Lacunza después, retaceaba los giros.
Desde la Cancillería indicaron que la cobertura del rojo financiero se cubrirá con el cobro de la Tasa de Estadística que grava importaciones. Dicha ampliación está destinada a subsanar esta situación de morosidad que afecta la representación de la Argentina en dichos organismos.