El Fondo confirmó que avanzan negociaciones para fortalecer las reservas
Los contratos nuevos de compraventa concertados en pesos el último día de la semana pasada y en fechas previas pero anotados el viernes sumaron en conjunto 156.096 toneladas, y el valor promedio de esos negocios resultó en $ 108.505 por unidad de peso.
Por otro lado, también se destacaron las fijaciones de operaciones concertadas con anterioridad al viernes por 60.196 toneladas, alcanzando un valor promedio de $ 108.903.
En relación con los negocios pactados en dólares, los contratos de compraventa de soja registraron un valor promedio de u$s 410,08 por un volumen de 21.746 toneladas; en tanto se anotaron fijaciones por 27.026 toneladas a un valor promedio de u$s 372.
Por otra parte, se registraron contratos sin determinar precio ni moneda por unas 42.098 toneladas, a la espera de acuerdo entre compradores y vendedores. En tanto, se comercializaron 11.107 toneladas de cebada forrajera y acumulan 518.635 desde el 25 de abril, cuando se incorporó al dólar agro. Se contabilizaron 57.032 toneladas de girasol, con un acumulado de 828.558; y 3.868 de sorgo, con un total de 45.861.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) dio anoche algunas señales respecto del avance de las negociaciones con la Argentina, y volvió a mencionar las complicaciones que genera la falta de lluvias a la economía local. “Estamos evaluando las medidas. En este momento seguimos discutiendo formas de fortalecer el programa y salvaguardar la estabilidad ante la severa sequía”, sostuvo un vocero del organismo.
En este sentido, el Fondo precisó que “como dijimos anteriormente, esto incluye políticas para mejorar la sostenibilidad fiscal y fortalecer las reservas, ambas esenciales para reducir la inflación, protegiendo al mismo tiempo a los más vulnerables”.
Mientras tanto, ayer la vicedirectora del Fondo Monetario Internacional (FMI) empezó su visita a la región desde Chile, para luego dirigirse a Brasil. Sin escala prevista en Argentina, la economista Gita Gopinath advirtió que se espera el crecimiento global más bajo en mucho tiempo por los próximos cinco años y que la inflación puede llegar a ser más persistente de lo esperado.
En una charla en el Banco Central de Chile, Gopinath analizó los “Desafíos Económicos Globales” y aseguró que “la recuperación viene de los países desarrollados pero es la reapertura de China la que está promoviendo el crecimiento”. Pese a eso, en el medio plazo “se espera un crecimiento del 3% para los próximos cinco años, que es lo más bajo en un largo tiempo”.
“No está claro que la in
De acuerdo con la BCBA, el viernes pasado se vendieron 305.880 toneladas de soja y acumulan 4.551.877
Los contratos de compraventa de soja registraron una media de u$s 410,08, por 21.746 toneladas
flación baje como se espera” dijo pero destacó que pese a la desaceleración de la actividad, los mercados laborales siguen siendo fuertes.
“El riesgo es que se necesiten más medidas de contracción monetaria que las previstas, con más subas de tasas”, detalló.
“Se vienen nuevos shocks”, vaticinó en función de esos riesgos. Para esto aseguró que “es necesario bajar los niveles de deuda y para eso, tener consolidación fiscal”.
La persistencia de la inflación está dada por la demanda que sigue relativamente alta. “Hay países individuales donde la indexación de los salarios es más fuerte, donde, aunque el mercado esté estancado, las demandas del sector laboral presionan a la inflación”, dijo.
Pero reconoció, mientras tanto que, en líneas generales, los salarios perdieron en los últimos meses y se están recuperando, indicó la economista a nivel global, mientras que las ganancias corporativas crecieron por la suba de precios y hay margen para que los salarios reales sigan avanzando.
Gopinath fue consultada por la deuda de Estados Unidos y la posibilidad de que el dólar deje de ser moneda de reserva de valor. La titular del FMI explicó la pasión por dólar, que no es exclusiva de la Argentina, aunque tiene otra magnitud en el plano local.
“El dólar sigue siendo la moneda dominante y la diversificación no sólo pasa al euro y el yen sino a monedas menores, cómo el dólar neozelandés”, ejemplificó.
El yuan chino, que hoy les da aire a las importaciones argentinas a través del swap, cobra relevancia pero no inquieta al FMI, que no lo considera un cambio abrupto.