El Ejecutivo debate cómo actualizar las jubilaciones
El vocero presidencial Manuel Adorni dijo que no impondrán el apartado previsional por DNU, aunque todavía persiste como posibilidad entre algunos funcionarios cercanos al Presidente
El Gobierno está definiendo la estrategia para modificar e impulsar el cambio de la fórmula de movilidad jubilatoria, la que permitiría que los haberes se indexen por inflación y aminoren la licuación que sufren con el cálculo que rige actualmente, proveniente de la gestión de Alberto Fernández.
El apartado previsional fue eje de debate en las reuniones que los representantes del Ejecutivo mantuvieron con los bloques del PRO y la UCR el pasado viernes y durante el lunes con los legisladores de Hacemos Coalición Federal.
En términos generales, el pedido de muchos de ellos fue tratar con especial rapidez -y por fuera del debate general de la Ley Bases- el cambio de la fórmula previsional para aliviar la situación de los jubilados. Según pudo saber El Cronista, esto ya está siendo considerado por algunos de los principales alfiles libertarios, aunque es algo que no todavía no consiguió consenso interno.
Este martes por la mañana comenzó a circular la versión de que el jefe de Estado había decidido movilizar el cambio de la fórmula jubilatoria mediante un decreto, algo que quitaría de las negociaciones más inmediatas a ese apartado y comenzaría a aplicar para el próximo cobro de los haberes.
Consultado al respecto, el vocero presidencial Manuel Adorni desestimó que exista la posibilidad de modificarlo por esa vía: “Por ahora, la fórmula por DNU no es una alternativa porque creemos que el debate debe darse entre todos los sectores y que debe ser un debate que debe dar la política”.
En tanto, las versiones son disímiles entre diversos funcionarios. Algunos abonan a las afirmaciones de Adorni, mientras que otros marcan que el Gobierno no descartó ninguna opción. No sería la primera vez que el vocero sienta la posición oficial sobre un asunto y días después eso cambia: aluden a que las decisiones del Presidente pueden ser cambiantes en función de la intensa dinámica de las negociaciones.
La propuesta oficial incluye la indexación de los haberes por inflación y una bonificación por única vez de 10%. Mientras que una parte de los radicales y del interbloque comandando por Miguel Pichetto piden tomar como base el IPC desde febrero y un aumento del 20,6%. Eso está en debate y no tiene acuerdo total.
Desde el bloque libertario dicen que el diálogo entre ambas partes se postergó para después de Semana Santa. Si el oficialismo no decide adelantar la implementación de la nueva fórmula, los jubilados seguirán manteniendo el mismo esquema que viene desde la gestión del Frente de Todos. Aunque no lo dicen en público, alegan que la licuación que sufren las jubilaciones y las pensiones están ayudando enormemente al objetivo de superávit fiscal que utilizan para anclar las expectativas.
El período para su tratamiento en el pleno de Diputados se estima para la segunda quincena de abril. Todavía resta un extenso camino: el proyecto de ley debe ser presentado en la cámara de origen, discutido, dictaminado, aprobado en Diputados
y comenzar ese ciclo nuevamente en el Senado, donde LLA tiene solo siete bancas y el peronismo, un peso preponderante.