Trump advierte que podría tener que vender sus activos por un juicio
Donald Trump ha dicho en una larga diatriba en las redes sociales que podría tener que vender sus activos para posponer la ejecución de una sentencia por fraude de u$s 464 millones, después de que sus abogados declararan que no podían encontrar una empresa que le ayudara a asegurar una fianza masiva.
En casi una docena de publicaciones en su red, Truth Social –que duraron desde el lunes a la noche hasta el martes a la mañana– Trump arremetió contra el juez Arthur Engoron y la fiscal general de Nueva York, Letitia James, atacando a quienes presentaron el caso que amenaza su imperio empresarial.
“Nadie ha oído hablar nunca de algo así”, escribió Trump en un post. “Me vería obligado a hipotecar o vender Grandes
Activos, tal vez a precios de Fire Sale, y si y cuando gane la Apelación, desaparecerían. ¿Tiene sentido? CAZA DE BRUJAS. INTERFERENCIA ELECTORAL!”
Trump dijo que una fianza de tal magnitud era “prácticamente imposible para CUALQUIER Empresa, incluida una tan exitosa como la mía”, y que la “Caza de Brujas” contra él era un intento de impedirle recuperar la Casa Blanca.
También dijo que el veredicto perjudicaría a la economía de Nueva York, y escribió: “¡¡¡Las empresas existentes huirán!!!”.
En enero, el expresidente y sus empresas fueron declarados responsables de cometer un fraude “flagrante” al inflar enormemente el valor de activos inmobiliarios básicos como Mar-a-lago, la residencia de Trump en Florida, y 40 Wall Street en las solicitudes de préstamos. La sentencia, que supera los u$s 464 millones con intereses, puede ser cobrada por el fiscal general de Nueva York a menos que Trump deposite una fianza por el importe total mientras apela.
El equipo jurídico de Trump dijo el lunes que la Organización
Trump se había puesto en contacto con 30 compañías de fianzas –incluidas Allianz, Axa, Berkshire Hathaway, Chubb, Munich Re, Swiss Re y Zurich– a través de cuatro brokers distintos, sin éxito.
La sentencia, una de las mayores sanciones impuestas a una empresa neoyorquina, ha disparado los costos legales del expresidente, que está luchando por cubrir, mientras prepara su campaña para la presidencia en las elecciones de noviembre.
Mientras Trump ha suplicado una prórroga, James ha insinuado el embargo de sus bienes, mencionando concretamente el 40 de Wall Street, una torre que Trump ha calificado de joya de la corona de su imperio inmobiliario.