La transformación digital agregará u$s 100 billones a la economía global
No se trata meramente de la digitalización de procesos, sino de un enfoque integral del negocio que permite repensar las experiencias de los clientes de la mano de la tecnología
La pandemia del Covid-19 fue un catalizador sin precedentes para la transformación digital en el panorama empresarial contemporáneo, dado que convirtió lo que solía ser una opción estratégica en una necesidad imperativa para todas las compañías.
La crisis sanitaria obligó a las organizaciones a replantearse la forma en que operan, interactúan con clientes y gestionan a sus empleados. Los fabricantes experimentaron la velocidad y eficacia con la que podían introducir nuevos productos en el mercado. Los minoristas se vieron compelidos a implementar rápidamente opciones de compra más seguras para sus clientes. Los empleadores adoptaron o expandieron el uso de tecnologías que posibilitan el trabajo remoto para sus empleados.
Lejos de limitarse a un acontecimiento de la historia, el impacto de la pandemia en la gestión empresarial perduró y dejó en claro que ninguna firma tiene la clave maestra del negocio y la adaptación continua de la mano de la tecnología es imperativa en un entorno en constante cambio.
UN CRECIMIENTO ACELERADO
Las estadísticas respaldan la creciente relevancia de la transformación digital en el panorama empresarial. IDC señaló que la inversión directa en transformación digital alcanzó los u$s 7 billones hacia fines de 2023.
Además, se prevé que el tamaño del mercado de transformación digital crezca a una tasa anual compuesta del 19,1%, alcanzando los u$s 127.500 millones en 2026, según Markets and Markets. El Foro Económico Mundial, por su parte, pronosticó que la transformación digital agregará u$s 100 billones a la economía mundial para 2025. Ahora bien, ¿de qué hablamos cuándo nos referimos a la transformación digital?
DIGITALIZACIÓN DE PROCESOS
La transformación digital adopta un enfoque centrado en la digitalización y orientado al cliente en todos los aspectos de una empresa; desde sus modelos de negocio hasta los procesos y las operaciones. Incorpora inteligencia artificial, automatización y cloud híbrido para aprovechar los datos y promover flujos de trabajo inteligentes. Así, acelera la toma de decisiones y facilita una respuesta inmediata a cambios en el mercado.
“No es desarrollar una app o tener presencia en redes, ni es digitalizar un proceso que viene del mundo físico, tampoco despapelizar. No es nada de eso. En todo caso, eso sí es la digitalización de algo. La transformación digital es mucho más profunda, es un cambio radical en la forma de hacer negocios”, señaló Gastón Gugliotta, Gerente General de Streambe, una compañía especializada en soluciones tecnológicas para la mejora de procesos y la transformación digital.
Además, aseguró: “Hoy en día, la transformación está estrechamente vinculada a la tecnología, pero no significa que deba adaptar mi negocio a una nueva tecnología; más bien, es al revés. El modelo de negocio es el que cambia, y la tecnología lo acompaña, siempre”.
Entre las herramientas que cobran un papel central para la optimización de los negocios, la tecnológica estadounidense IBM destacó: la inteligencia artificial, blockchain, los microservicios, el cloud híbrido y la internet de las cosas.
“Las empresas empiezan visualizando la experiencia que quieren que los clientes tengan con su producto y su marca durante tantos meses o años como quieran que sean clientes. Este objetivo significa que deben analizar su mercado, junto a las tendencias tecnológicas, para prever o anticipar cómo pueden cambiar las necesidades o expectativas de los clientes y detectar oportunidades de disrupción”, detalló la multinacional con sede en Armonk.
Este tipo de estrategias son la razón por la cual tantas áreas de negocio son diferentes a las de hace 20 años. El beneficio de esta transformación, según Gugliotta, va más allá de los aspectos tangibles: “es hoy una necesidad imperiosa; si no te transformás, te quedás fuera de la competencia”.
La IA, blockchain, los microservicios, el cloud híbrido y la internet de las cosas tendrán fuerte impacto en los negocios