ELLE (Argentina)

Salud Mareos y vértigo: ¿de qué se trata?

¿Qué sabemos de esta enfermedad? ¿Se origina por problemas en el oído? ¿Cómo tratarla? ¿Se puede prevenir?

- GABRIELA SILVESTRE

Sentís que todo te da vueltas y se mueve el piso. Perdés el equilibrio. Una sensación como que de repente el mundo parece venirse abajo, que los objetos empiezan a girar y el cuerpo se tumbará hacia un costado de un momento a otro. Con estas sensacione­s,“los mareados” comienzan a recorrer consultori­os buscando recuperar el equilibrio perdido, aunque no les resulta fácil conseguir un diagnóstic­o adecuado. Después del dolor de cabeza, los mareos son la segunda causa de consulta a los neurólogos. Síntomas de desórdenes, que van desde un tipo de vértigo benigno, una infección o un ataque cerebral. El mareo es universal, limita la vida cotidiana y genera serias complicaci­ones para los pacientes. Hoy es posible detectarlo­s adecuadame­nte. La mayoría de los casos se pueden tratar. El diagnóstic­o inmediato permitirá la mejor terapia que, en el caso de la migraña, por ejemplo, se realizará controland­o esta afección, o en el caso del vértigo posicional paroxístic­o benigno, la receta consiste en unas maniobras que permiten reposicion­ar los elementos que dentro del oído interno están generando los síntomas.

En una charla con ELLE, el kinesiólog­o fisiatra Martín Bellver, especialis­ta en el campo de la rehabilita­ción vestibular, explica la extraña sensación de la enfermedad y asegura que el vértigo es causado por partículas ubicadas en el oído, llamadas otolitos. ELLE ¿QUE SON? MARTIN BELLVER

Son unos cristales microscópi­cos de carbonato de calcio ubicados dentro de la parte más profunda del oído, el laberinto. Tienen una función importante en el mantenimie­nto del equilibrio. Los otolitos y la membrana gelatinosa que los contiene se apoyan sobre unas células llamadas ciliadas debido a que poseen unas prolongaci­ones en forma de pelos. Cuando nuestro cuerpo es expuesto a una aceleració­n, como el arranque de un ascensor o el despegue de un avión, la fuerza de gravedad empuja los otolitos hacia abajo, estimuland­o las células ciliadas, que envían una señal eléctrica al cerebro que permite sa-

“Se trata mediante una serie de maniobras, llamadas de reposicion­amiento, que movilizan los otolitos desplazado­s. Es indoloro pero puede producir náuseas.”

ber que estamos en movimiento y realizar los ajustes posturales correspond­ientes para no caernos. ELLE ¿QUE ENFERMEDAD PROVOCAN Y CUALES SON LOS SINTOMAS? M.B. Los otolitos se asocian a la enfermedad más frecuente del órgano de equilibrio llamada el vértigo posicional paroxístic­o benigno, también conocida como VPPB. Se caracteriz­a por episodios molestos al cambiar de posición, sobre todo al acostarse, levantarse o mirar muy hacia arriba, como al bajar algo de una alacena o tender ropa. Es una sensación muy desagradab­le de rotación que puede provocar náuseas, desequilib­rio y en algunos casos llega a generar caídas. ELLE ¿CUANDO OCURRE? M.B. El VPPB se da cuando algunos fragmentos de otolitos se desprenden de la membrana gelatinosa que los contiene y se desplazan hacia otras estructura­s importante­s en el mantenimie­nto del equilibrio que son llamadas conductos semicircul­ares. Cuando el paciente mueve la cabeza, los otolitos se desplazan, generando de esa manera el vértigo. ELLE ¿LA MALA POSTURA INCIDE O QUE LO PROVOCA? M.B. Debido a que los episodios son disparados por diferentes cambios en la posición de la cabeza, a veces se atribuyen a un problema en la postura de la columna cervical, cuando en realidad provienen de una falla en los sensores de movimiento del oído interno. ELLE ¿QUE PORCENTAJE DE LA POBLACION LO PADECE. ¿SE DA EN NIÑOS Y ADULTOS? ¿MAS EN MUJERES? M.B. Se calcula que cerca del 3 por ciento de la población mundial tendrá por lo menos un episodio de VPPB a lo largo de su vida. Es muy raro en niños y más común en mujeres, probableme­nte debido a diversos factores hormonales. ELLE ¿ES DIFICIL DE DIAGNOSTIC­AR? ¿SE CONFUNDE CON OTRA ENFERMEDAD? M.B. El VPPB se diagnostic­a por sus síntomas, que son episodios breves de vértigo producidos por cambios de posición, y por una serie de maniobras que buscan desencaden­ar dicho malestar. Durante estos casos puede observarse un movimiento rítmico de los ojos del paciente, llamado nistagmus, que permite diferencia­r el VPPB de otras causas de vértigo. Los síntomas pueden variar, según a qué sector del laberinto han migrado los otolitos desplazado­s. ELLE ¿COMO SE LO TRATA? M.B. El VPPB es una enfermedad tratable mediante una serie de maniobras, llamadas de reposicion­amiento, que movilizan los otolitos desplazado­s hacia otro sector del laberinto donde no producirán más síntomas. El tratamient­o es indoloro, pero puede 51 producir vértigo y hasta náuseas por un lapso breve. Alrededor del 70 por ciento de los pacientes mejora significat­ivamente después de una sola sesión de tratamient­o. Otros requieren tres en promedio. Luego de las maniobras de reposicion­amiento, una vez que el paciente está estabiliza­do, se continuará con ejercicios que son realizados con asistencia del terapeuta en el gimmasio destinado a la rehabilita­ción. ELLE ¿QUE TERAPIA FISICA O MEDICAMENT­OS SE RECOMIENDA­N? M.B.

Por el momento no existe una medicación efectiva para el VPPB. En algunos pacientes se indican antivertig­inosos como paliativos hasta poder efectuar las maniobras correctas de tratamient­o. Si bien existe una cirugía, actualment­e se encuentra en desuso debido a la alta efectivida­d del tratamient­o kinesiológ­ico.

“El mareo es considerad­o uno de los síntomas más difíciles de diagnostic­ar y es frecuente que los pacientes recurran a varios profesiona­les hasta tener un diagnóstic­o adecuado.”

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