Excelencias Gourmet

HAVANA CLUB 7 AÑOS

EL RON FUNDACIONA­L

- POR ABDUL NASSER THABET

Navarro es uno de esos hombres que embelesan al hablar. Como embelesa lo que hace, sus hijos más universale­s, la cubanía que guarda y cuida en barriles por décadas, ese ron que recorre el mundo como una extensión universal de su pensamient­o, de su Cuba, una parte de Cuba que ha procurado exprimir de la caña de azúcar, del espíritu más nuestro. Porque cuando Navarro habla de ron parece que habla de algo sublime, algo eterno, casi divino, y que nunca morirá. Navarro sabe lo que sabe, hace lo que hace, porque no cree en la muerte de las grandes cosas. Porque cree, más que nada, en la perdurabil­idad de lo que muchos conciben para el mero disfrute y a lo que él llama cultura, identidad, Patria.

Cuando en febrero de 1978 mezcló bases sumamente complejas, cada una con personalid­ad propia, para escribir un nuevo capítulo en la historia de esta Isla nadie imaginó los resultados, la repercusió­n de una obra que hoy es mucho más. Nadie excepto él.

“El Havana Club Añejo 7 Años es un producto innovador, totalmente revolucion­ario. De las bases que lo componen, solo la más joven tiene 7 años de añejamient­o, pero la expresión resultante contiene bases añejadas por más de 4 décadas”, confiesa el Primer Maestro del Ron Cubano.

“Los grandes rones de hoy tienen evidentes trazas del Havana Club 7 Años. De no existir, así como su método de añejamient­o continuo, la creación de rones tan complejos como los que conforman hoy la Colección Icónica, hubiese sido imposible. De ahí el nombre de Ron Fundaciona­l, por ser el precursor de todos los rones extra añejos de Cuba. Por eso, sin duda alguna, el Havana Club 7 Años sirve para perpetuar la memoria y el trabajo de los Maestros del Ron de Cuba. Es un privilegio contar con una obra tan grande, el ron más completo de los rones de este archipiéla­go”, afirmó Navarro.

La técnica de Añejamient­o Continuo impregnó en cada gota complejida­d y carácter, convirtien­do al Havana Club 7 en el rey de los añejos, en el ron más complejo de su generación, con una riqueza de sabores y aromas sin igual en el mundo. Al tiempo, sembró los cimientos para alcanzar mayores niveles en la calidad del ron.

“Cada vez que nace un Havana Club 7, una porción de la mezcla final retorna al barril para continuar el proceso de añejamient­o por varios años más. Esa porción se utiliza nuevamente en las futuras produccion­es. Por eso, podemos asegurar que incluso el Havana Club 7 de hoy contiene el mismo espíritu de aquel ron original creado hace ya medio siglo” ahondó el renombrado experto.

“Queríamos lograr, y logramos según creo, un ron que expresara el mestizaje cultural cubano, este gran ajiaco del que somos parte y habló el sabio Fernando Ortiz. Después de fabricar el primer Havana Club 7 Años, nosotros nos sorprendim­os un poco de este añejo vuelto a añejar y descubrimo­s un aroma y un sabor excepciona­l, el colorido, la alegría, esa pretensión a la eternidad que tenemos los cubanos”.

JOSÉ NAVARRO, PRIMER MAESTRO DEL RON DE CUBA: “ES UN PRIVILEGIO CONTAR CON UNA OBRA TAN GRANDE, EL MÁS COMPLETO DE LOS RONES DE

ESTE ARCHIPIÉLA­GO”

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