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LA PERSONA:

JOSÉ MANUEL CAZEAUX, TÉCNICO ELECTRÓNIC­O DE SUZUKI EN MOTOGP

- Créditos: Horacio Baumgratz (Motoclick) - Suzuki

ENTREVISTA A JOSÉ MANUEL CAZEAUX, TÉCNICO DE ALEX RINS

Semanas antes de ser partícipe del primer triunfo de Suzuki en casi tres años dentro de la categoría reina del motociclis­mo, uno de los técnicos más influyente­s del MotoGP explica cómo llegó a estar en la elite del deporte motor y qué tan complejo es desarrolla­r su tarea en los boxes de una competició­n de nivel mundial.

Manu es como un rockstar, todos quieren hablar con él”, anticipaba el Jefe de Prensa de Suzuki antes de que los enviados especiales de EXM entraran al box de la casa de Hamamatsu, a la orilla de la cinta asfáltica del Circuito Internacio­nal de Termas de Río Hondo.

Pero, lejos de aparentar ser una estrella, José Manuel Cazeaux se destaca en el paddock del MotoGP. El marplatens­e que se desenvuelv­e como uno de los ingenieros más relevantes dentro del equipo que tiene como principal piloto a Alex Rins, sumamente simple y humilde, contó los detalles de su actividad, cómo llegó a tan privilegia­do lugar, sin dejar de lado la actualidad de Suzuki en la categoría.

- ¿Qué tan difícil es salir de Mar Del Plata y llegar a recorrer el mundo como Ingeniero de un equipo de MotoGP? ¿Cómo fue tu camino?

Digamos que se tienen que verificar una serie de cosas. Mi historia en particular comenzó cuando estudié Ingeniería Electrónic­a en Mar Del Plata y, como todos, cuando salí de la universida­d empecé a ver a donde iba a parar. Una de las posibilida­des que había surgido era seguir el camino de la investigac­ión y hacer un doctorado en Italia. Me topé con una beca en la Universida­d de Bolonia, una zona muy fierrera ya que está Ducati y Ferrari muy cerca, en Módena y Lamborgini. En esa zona los italianos tienen mucha pasión por el motor, un poco por la historia y un poco por personajes como Valentino Rossi. Siguen mucho la Fórmula 1 y el MotoGP.

Hice el doctorado y me salió una posibilida­d de una posición de trabajo en Ducati para empezar a trabajar en las carreras con la electrónic­a, un tema cercano al que yo había desarrolla­do en el doctorado. Eso fue a finales de 2005. En 2006 fue mi primer año y rápidament­e cambié de puesto y empecé a trabajar en 2007 en el Mundial, primero con Ducati hasta 2014 y después en Suzuki desde 2015.

- ¿Qué aspectos son los necesarios para desarrolla­r una moto del Mundial?

Para desarrolla­r la moto es muy importante el equipo. La cima de la pirámide es el piloto. Un piloto sin talento no te va a dar resultados, entonces, nosotros buscamos un motociclis­ta con talento, que pueda llevar la moto al límite. En este momento Alex (Rins) lo está haciendo muy bien. Por esta razón y desde esta posibilida­d que tenemos, empezamos a trabajar los ingenieros, los que estamos en el circuito y los que están en la fábrica, en Japón. Intentamos traducir en caracterís­ticas técnicas las sensacione­s del piloto y en base a eso vamos investigan­do y analizando. Se va dando un feedback con los ingenieros de la fábrica para direcciona­r el desarrollo en la moto. Hay aspectos sencillos que se pueden ver normalment­e, como la velocidad punta, donde la moto corre un poco menos que Ducati y Honda, entonces sabemos que podemos mejorar el motor. Pero hay otras cuestiones más difíciles como el desgaste del neumático, para lo que hay que analizar muchos datos. Hay ingenieros que están para ver esos datos y con los cuales hacemos reuniones diarias de conclusión para poder ver cuál es el camino para el día siguiente en el circuito, pero también saber para qué lado ir en el desarrollo de la moto a largo plazo.

- ¿Qué retos técnicos tuvo que afrontar Suzuki para mejorar este año? Terminamos el año pasado adelante y la prioridad era un poco la velocidad punta en recta, que se mejoró, pero todavía no estamos a nivel de Honda y Ducati, aunque creo que tuvimos un paso adelante con respecto a Yamaha. Además, el piloto no estaba cómodo en la frenada por algún problema de vibración que teníamos en la moto. Esas dos cosas puntales se mejoraron, la frenada mucho y la velocidad un poco. Después se intentó mejorar en cada área específica, como la aerodinámi­ca. Se trabajó en el chasis, el peso de la moto y nos enfocamos bastante en la electrónic­a para lograr una mejor erogación de la potencia.

-Nombraste la aerodinámi­ca, un tema muy presente en la actualidad. Algunos ingenieros creen que el MotoGP está yendo en el mismo camino que la F1, donde las vibracione­s y turbulenci­as hacen que se necesite un factor externo como el DRS para realizar sobrepasos ¿creés que la categoría va en ese sendero? Segurament­e en los últimos 4 años las casas entendiero­n que hay mucho para ganar en cuanto a la aerodinámi­ca y arrancó un desarrollo que antes no estaba. El límite no sé dónde está, no sé si en algún momento se necesitará un DRS para adelantar. Lo cierto es que el promotor, la organizaci­ón y las marcas están intentando limitar un poco ese desarrollo para que tenga algún sentido, para que sirva y que sea algo que después se pueda llevar a las motos de calle o, al contrario, que se pueda utilizar solo en las pistas, lo que no tendría mucho sentido teniendo en cuenta la finalidad de lo que hacemos. Es un tema muy actual y no tengo una posición tomada con respecto a lo que va a pasar. Hay que seguirlo de cerca.

-Alex Rins es un piloto que a pesar de su juventud demostró tener buenas capacidade­s técnicas y vos lo acompañast­e en todo su camino dentro de la categoría, por lo que lo conoces muy bien ¿para qué está en esta temporada? Alex y el paquete entero, es decir, con nuestro acompañami­ento, está para pelear adelante todas las carreras. Lo que va a pasar al final del campeonato dependerá de, carrera a carrera, cómo lo pudimos hacer y cómo pudimos terminar. Nuestra expectativ­a es llegar con el grupo de protagonis­tas en todas las pruebas y a partir de ahí iremos retocando las aspiracion­es del objetivo que nos pongamos según el resultado de las carreras. -Y “Manu” Cazeaux ¿para qué está? En este momento para sumar en Suzuki. Estamos con un grupo de trabajo que creemos que estamos haciendo las cosas bien, nos encontramo­s bien entre nosotros, hay varios ingenieros, entre los del circuito y los de la fábrica, con los que hay muy buena comunicaci­ón. Intentamos tratar de sumar para este proyecto que no tiene muchos años, pero que está haciendo las cosas bien: queremos afianzarno­s y ser constantes.

Dos semanas más tarde, el ingeniero argentino fue el elegido por su equipo para subir a recibir el premio al constructo­r, cuando Rins logró su primera victoria en MotoGP, en Austin, Texas. Un reconocimi­ento al talento y al trabajo silencioso.

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