KTM ABANDONARÁ MOTO2 EN 2020: ¿DIFICULTADES ECONÓMICAS O ESTRATEGIAS?
KTM, uno de los equipos oficiales con mayor repercusión en Moto2, anunció que dejará de participar como estructura oficial en la categoría intermedia del Campeonato Mundial con el fin de intentar enfocarse plenamente en el desarrollo del prototipo de MotoGP y volverlo mucho más competitivo.
De todos modos, la marca seguirá apoyando logísticamente al equipo de la división intermedia propiedad de Aki Ajo, para mantener la posibilidad de impulsar pilotos entre las distintas categorías, como sucedió con Johann Zarco, bicampeón de Moto2 con la marca y posteriormente piloto de KTM en la categoría reina.
Lo cierto es que la empresa austríaca seguirá en Moto3, así como continuará siendo una pata más que importante en la Red Bull Rookies Cup (divisional de desarrollo organizada por Dorna) y lanzará la Northern Talent Cup con pequeñas motos derivadas de las KTM SX-F250 de motocross adaptadas a la velocidad. Como si fuera poco, acaba de anunciar el regreso de Husqvarna a Moto3 (marca que está dentro del Grupo KTM AG).
¿Problemas económicos? Para nada. Esta situación ayuda mucho a entender cómo funciona la alta competición para las marcas más importantes del mundo, qué cartas son las que juegan a la hora de tomar decisiones en cuanto a las estructuras que las representarán y de qué manera lo harán.
El plan de KTM, denominado reestructuración proactiva, es muy arduo ya que con él buscan convertirse en una referencia en los circuitos de velocidad igual que lo consiguieron en el Off-Road, no solo en la competencia sino también en la consideración del usuario promedio, pero está claro que no es tan sencillo. Por eso tomaron la decisión de dejar de aparecer en una “vidriera” internacional tan importante, para no ser partícipes del creciente crédito que tienen los motores de Triumph. Puntualmente, el caso de KTM tiene que ver con una cuestión de posicionamiento e imagen de la empresa: desde que la categoría utiliza los motores de la firma inglesa“parte del mérito de los triunfos de la casa naranja en Moto2 van para Triumph”, según explican, quien es uno de sus grandes rivales en el mercado de la media cilindrada en el continente europeo, territorio que para la factoría de Mattighofen es de extrema importancia en cuanto a ventas.
Por el momento la determinación de enfocarse en las competencias que “más representan a sus productos” parece razonable y, además, cuentan con cinco años más para seguir intentando convertirse en otro referente de la categoría reina, ya que firmaron un contrato con Dorna para seguir en MotoGP hasta 2024.