Moto Clásica:
Norton RWC 588
Las ansias de la marca británica por volver a los primeros planos dentro del mundo de la competición, más de 30 años después de su última victoria, se concretaron con una unidad deportiva que se volvió icónica por su novedoso motor pero que, a contrapartida, no pudo seguir desarrollándose por problemas económicos.
ES CIERTO QUE EL NACIMIENTO de la Norton RCW 588 data de finales de la década de los ´80, pero para entender su concepción es necesario ir más atrás en el tiempo, concretamente a la década de los ´70 cuando la marca británica todavía era parte de la empresa BSA. En ese entonces, el ingeniero David Garside empezó a desarrollar el propulsor rotativo Wankel y se decidió instalarlo en el modelo Interpol, una motocicleta producida únicamente para los cuerpos especiales, como policía, y bomberos. Su buen rendimiento hizo que tiempo más tarde ese motor bicilíndrico diera lugar a una moto de producción continua que años después le dio base a la RCW 558.
Antes de ese acontecimiento hubo un punto de inflexión en la historia, más bien el ingreso de un actor fundamental: en 1984 Brian Crighton, se unió a Norton para supervisar diferentes proyectos de la marca y fue en ese momento cuando este ingeniero se percató del potencial que albergaba aquel atípico propulsor. Durante el año 1987 Crighton empezó a realizar diferentes pruebas del motor por propia iniciativa, con un prototipo, ya que la fábrica hasta ese momento no era partidaria del proyecto por falta de liquidez económica. La deportiva comenzó a llamar la atención de propios y extraños antes del año de su lanzamiento, pero fue en ese curso que se realizó una variante sustancial en el motor: se optó por cambiar el sistema de refrigeración por aire a uno líquido, contribuyendo de este modo a un mejor rendimiento del propulsor que se destacaba con cifras de 130 CV de potencia y llegando hasta los 140 CV a 10.500 RPM gracias a la aplicación del RAM-Air. La RCW 588 se posicionó rápidamente como una exponente importante, nacida para volver a colocar a la marca entre los primeros planos de los campeonatos del mundo, pero antes debió comenzar a demostrar su potencial en su país, cometido que logró con creces al adjudicarse el título de la copa Británica F1 a manos del piloto Steve Spray y conquistar el campeonato Supercup.
Es necesario aclarar que el motor de este modelo seguía siendo aquel que se había gestado para la Interpol hace casi 20 años atrás, pero con el doble de potencia. Aún así, para poder competir a nivel internacional en carreras FIM, la moto debía bajar su cilindrada a 500 cc: para ello se utilizó un sistema de distribución por lumbreras, así como electro ventiladores para mantener la temperatura en valores óptimos en el corazón de la RCW 588, siendo la alimentación por medio de dos carburadores de 36 mm fabricados específicamente para el modelo por Amal, con una compresión final de 9,2:1. Esa base le permitía alcanzar 302 km/h, algo que demostró el gran Robert Dunlop en la mítica carrera North-West 200 de 1990.
El chasis de la RCW 588 y su reparto de masas fue uno de sus problemas más importantes ya que, su estructura de este doble viga de aluminio con basculante trasero en el mismo material, era, según los probadores de la época, desacertado e inspiraba poca confianza al llevar la moto al extremo.
“...en el motor: se optó por cambiar el sistema de refrigeración por a aire a uno líquido, contribuyendo de este modo a un mejor rendimiento del propulsor que se destacaba con cifras de 130 CV de potencia y llegando hasta los 140 CV a 10.500 RPM gracias a la aplicación del RAM-Air.”
Aun así, finalmente, la marca consiguió en la temporada 1990 que la FIM aceptara la RCW 588 para participar en el mundial de 500 cc, pero su participación no terminó de tener buenas actuaciones ya que las unidades con las que competía eran mucho más efectivas a nivel dinámico, gracias a un reparto de pesos y parte ciclo ideal para aprovechar al máximo la potencia, apartado en el que la Norton si era buena.
Aún así, en la temporada 1992 Steve Hislop logró la victoria en la carrera Sénior del TT, más de 30 años después para la marca y venciendo a un tal Carl Fogarty, que poco después brillaría en el mundial de Superbikes.
En 1990 la marca lanzó un modelo de calle de la RCW 58, pero con 95 CV y con una decoración similar a la moto de carreras que contaba con el patrocinio de la tabacalera JPS (John Players & Sons), Solo estuvo dos años en venta, ya que su
“En 1990 la marca lanzó un modelo de calle de la RCW 58, pero con 95 CV y con una decoración similar a la moto de carreras que contaba con el patrocinio de la tabacalera JPS”
elevado precio y poca repercusión no la llevaron más allá de unas pocas unidades fabricadas bajo pedido y de manera casi artesanal.
De todos modos, en la actualidad, tanto esta RCW 588 como la versión de calle denominada Norton F1 JPS, se colocaron como objetos de deseo dentro de los coleccionistas y amantes de la marca.