LOS DESAFÍOS DEL FUTURO
Movilidad eléctrica, digitalización y autonomía son los tres desafíos que la industria deberá resolver para los próximos años según Ralf Brandstätter, jefe de Operaciones Global de Volkswagen, quien define el auto del futuro como un “dispositivo sobre ruedas”. Estos desafíos significan “fuertes inversiones” en investigación, por lo que, para el ejecutivo alemán, no será extraño ver cada vez más alianzas en el mercado. “Todos tendrán que reiniciarse en estos temas. Algunos lo están haciendo por su cuenta y otros en cooperación”, destaca. El último 15 de enero, en el Salón de Detroit, un anuncio sacudió a la industria: Volkswagen se asociará con Ford para producir Ranger y Amarok. “No hay una decisión tomada; creo que el mensaje principal es que este acuerdo de cooperación no sustituye nuestra estrategia”, dice, calmando las aguas, Brandstätter. “Las charlas son positivas y tienen buen espíritu, pero al momento no podemos anunciar efectos adicionales”, aclara. Volkswagen tiene en la cabeza otro objetivo: vender un millón de autos eléctricos a nivel global para 2025. Esto será posible gracias al desarrollo de la plataforma MEB (Kit de Herramientas de Electrificación Modular, por sus siglas en alemán), que consiste en un chasis sin la carrocería ni el interior concebido de cero para autos eléctricos.
¿Qué piensa de la electrificación en mercados emergentes?
El primer mercado será China. Europa también está impulsando la electrificación. Desde el punto de vista de las regulaciones, estamos forzados a vender un 40% de vehículos eléctricos sobre nuestro volumen total para 2025. Al momento, no vemos regulaciones en América del Sur.
¿Qué otros problemas detectan en Argentina y Brasil para traer el auto eléctrico?
Vemos tres puntos. Primero, que los vehículos eléctricos son muy caros, la gente no los compra. Por eso, necesitamos desarrollar autos que sean accesibles para el consumidor de hoy. El segundo es la autonomía que pueda alcanzar. Un auto eléctrico actual llega a 150, 200 kilómetros. El objetivo es que pueda alcanzar los 500 o 600 kilómetros. El tercer punto es la infraestructura para cargarlos. Ese es un desafío que tenemos que resolver en cada mercado en particular.