La próxima Casa Blanca
El presidente electo Joe Biden empezó a definir a su equipo económico con una mirada expansiva para lograr la recuperación de la recesión pandémica. Cuáles son los obstáculos que se encontrará cuando asuma el mando.
Cómo será el equipo económico de Joe Biden para lograr la recuperación de la recesión.
EEl próximo miércoles 20 de enero, Joseph Robinette Biden Jr. tomará control de la Casa Blanca y se sentará oficialmente en el Salón Oval como nuevo presidente de los Estados Unidos. Sin embargo, desde el pasado 7 de noviembre, cuando se confirmó su victoria en las urnas, el exvicepresidente de Barack Obama comenzó a moverse y a delinear su estrategia para recuperar la economía estadounidense del golpe causado por la pandemia.
Algunos nombres en danza para su staff ya fueron confirmados, aunque aún deben obtener luz verde desde el Senado, mientras que otros todavía estaban en duda al cierre de esta edición. La principal urgencia, sin duda, pasará por lograr seducir al Congreso para que apruebe un nuevo y multimillonario paquete de ayuda para brindar beneficios a los desempleados, créditos a las empresas y alivios fiscales a los estados y ciudades.
Mientras tanto, desde la actual administración también movieron sus piezas y pidieron que la Reserva Federal corte algunos programas de asistencia a partir del próximo 31 de diciembre.
Trabajo en equipo
Los primeros días de diciembre Biden dio a conocer más certezas sobre su equipo económico. Janet Yellen fue nominada para ocupar la Secretaría del Tesoro de los Estados Unidos. De ser confirmada por el Senado, Yellen, de 74 años, será la primera mujer del país en ocupar el puesto en sus 232 años de historia. “Como secretaria del Tesoro, trabajaré todos los días para reconstruir ese sueño para todos”, dijo recientemente.
A lo largo de los años, la oficina del secretario del Tesoro fue adquiriendo mayores funciones de las que tenía cuando se estableció en 1789. En 2021, será clave su labor en la financiación de los planes de ayuda COVID-19 y una propuesta de impuesto al carbono. Economista experimentada, tiene una sólida formación tanto en el mundo académico como en Washington. Fue la primera mujer en ocupar el cargo de presidenta de la Reserva Federal de 2014 a 2018 después de ocupar el cargo de vicepresidenta. También fue presidenta y directora ejecutiva del Banco de la Reserva Federal de San Francisco de 2004 a 2010, y presidenta del Consejo de Asesores Económicos de la Casa Blanca de 1997 a 1999, tiempo durante el cual fue una de las principales asesoras de la crisis financiera asiática.
Pero no fue el único anuncio. Adewale “Wally” Adeyemo, quien hoy preside la Fundación Obama y es exjefe de personal de la Oficina de Protección Financiera del Consumidor, será nominado para servir como director adjunto del Tesoro y sería el primer afroamericano en ocupar ese cargo si se confirma. Además, Neera Tanden, presidenta y directora ejecutiva del Center for American Progress, fue designada para dirigir la Oficina de Gestión y Presupuesto, y Cecilia Rouse para comandar el Consejo de Asesores Económicos. En tanto, Jared Bernstein y Heather Boushey, quienes se desempeñaron como asesores económicos de Biden durante la campaña, también formarán parte del Consejo de Asesores Económicos. Según varios informes de noticias, el exasistente de la administración de Obama y actual director gerente de Blackrock, Brian Deese, encabezará el Consejo Económico Nacional.
Presencia femenina
Haciendo honor a su promesa de un equipo diverso, Biden aseguró que contratará a un equipo de comunicaciones formado exclusivamente por mujeres. Es la primera vez en la historia que sucede algo así. Jennifer Psaki será su secretaria de prensa. Tiene experiencia en la Casa Blanca: fue directora de Comunicaciones del expresidente Barack Obama en 2015 y vocera del secretario de Estado, John Kerry.
Symone Sanders, quien también tuvo un alto perfil durante la campaña, se desempeñará como asesor principal y portavoz de la vicepresidenta electa Kamala Harris, y Kate Bedingfield, directora de Comunicaciones de campaña de Biden, dirigirá las operaciones de prensa en la Casa Blanca. Entre otros nombres, se mencionó a Ashley Etienne (como directora de Comunicaciones de la vicepresidenta electa Kamala Harris), Pili Tobar (subdirectora de Comunicaciones de la Casa Blanca), Karine Jean Pierre (como subsecretaria de Prensa) y Elizabeth Alexander (directora de Comunicaciones junto a la primera dama).
Otra elección en puerta
Si bien los comicios presidenciales ya terminaron, aunque el actual mandatario aún intente jugar su última carta en la Justicia, el presidente electo tiene en la mira un resultado electoral que podría cambiar su gobierno. El próximo 5
GEORGIA DEFINIRÁ QUIÉN CONTROLA EL SENADO EL PRÓXIMO 5 DE ENERO. LOS REPUBLICANOS DEBEN GANAR SOLO UNA BANCA PARA QUEDARSE CON EL PODER.
de enero los ciudadanos de Georgia definirán qué partido dominará el Senado cuando se lleve a cabo la segunda vuelta por los dos escaños que quedan. Si los republicanos consiguen al menos uno, obtendrán la mayoría en un organismo clave para los planes de recuperación económica de Biden.
En la presentación de su team económico, el demócrata pidió al Congreso que apruebe un paquete de ayuda sustancial de US$ 908.000 millones elaborado por un grupo bipartidista de senadores del centro. Sin embargo, se topó con el conservadurismo republicano respecto de un incremento en el gasto público. El voto georgiano lo ayudaría a torcer esta barrera.
Durante la gestión Trump la deuda nacional superó los US$ 21,2 billones, un alza del 47% respecto de la que había cuando asumió el mando (US$ 14,4 billones). Incluso llegó a autoproclamarse como “el rey de la deuda”. “Soy muy bueno con la deuda. Nadie la conoce mejor que yo”, aseguró en 2016 a CBS.
Uno de los puntos que remarca el presidente electo tiene que ver con la recuperación del empleo y de las pequeñas empresas. Según la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS, por sus siglas en inglés), la tasa de desempleo en noviembre fue del 6,7%, ocho puntos porcentuales por debajo del pico de abril (14,7%), pero 3,2 por encima de febrero. En tanto, el desempleo long-term, es decir, aquellos que se encuentran sin trabajo hace 27 semanas o más, sumó 385.000 casos y ya afecta a 3,9 millones de personas, un 36% del total.