Diversificar la cartera
BITCOIN ES LA ESTRELLA, PERO HAY MÁS ALTERNATIVAS PARA APROVECHAR EL BOOM DE LAS CRIPTOMONEDAS.
SSon el boom del momento y nadie quiere quedarse afuera. Aunque las oscilaciones en las cotizaciones muchas veces dan vértigo y la mayoría de los inversores no terminan de comprender exactamente cómo funcionan las monedas digitales, llegaron para quedarse.
El Bitcoin, la moneda más famosa del universo cripto, marcó en febrero un nuevo máximo de US$ 55.000, recortó, se acomodó y volvió a tomar carrera. ¿Dónde puede llegar? Nadie puede ponerle un número, pero la entrada de grandes inversores jugadores levanta la vara. “El hecho de que empresas como Tesla, Mastercard, BNY Mellon o Microstrategy inviertan en cripto no hace más que fortalecer el rumbo, da más confianza y credibilidad a los inversores para diversificar carteras”, destaca Matías Bari, CEO y cofundador de Satoshitango.
“Las criptomonedas están cada vez más instaladas entre los inversores tradicionales. Por un lado, los ciudadanos están cada vez más capacitados; y las restricciones para acceder al dólar hacen que los usuarios se vuelquen hacia nuevas maneras de inversión”, explica Magdiela Rivas, gerente para Latinoamérica de Paxful. “Criptoactivos como Bitcoin deberían ser considerados como una parte clave del portfolio de cualquier inversor porque –más allá de ser uno de los activos con mayor capitalización de mercado del mundo– es el primer paso hacia la economía digital en pleno desarrollo”, dice Juan José Mendez, Chief Brand Officer de Ripio.
En el universo cripto hay cientos de opciones diferentes, aunque no todas igual de desarrolladas y robustas. Bitcoin (BTC) es la más popular porque es la primera cripto, asentada en una red blockchain. “El 98% de las personas que invirtieron en BTC (y lo mantuvieron) a lo largo de su historia obtuvieron una ganancia”, dice Bari. Altcoin son todas las monedas alternativas a Bitcoin, como Ether (basada en la red Ethereum),
Cardano, USDT. Una última segmentación es entre monedas volátiles (BTC, Ether) y las Stablecoin, ligadas al valor de una moneda fiduciaria (dólar, euro), al oro o a otro activo subyacente. Su precio es más estable. Algunas de ellas: DAI, USDT.
A la hora de invertir en criptomonedas, se puede hacer a través de alguno de los exchange que operan en el mercado argentino como Binance, Satoshitango, Paxful, Ripio. Abrir una cuenta es sencillo y no se necesita el equivalente al valor de un Bitcoin. “No existen mínimos de inversión. Con las criptomonedas se democratiza el acceso a las inversiones, sin intermediarios que cobren comisiones elevadas”, aclara Maximiliano Hinz, Latam Operations Director de Binance. “Si se hacen inversiones estratégicas en cripto, una persona puede multiplicar muy rápidamente su capital. Hace 3 años, BNB (Binance coin) cotizaba US$ 0,01 y hoy cotiza en torno a los US$ 250”.
También se puede entrar al ecosistema digital a través de la plataforma Sesocio.com. “Es un marketplace de inversiones que tiene tres tipos de inversiones: compra/venta de criptomonedas, de activos tokenizados con proyectos de la economía real y una tarjeta propia cuyo saldo puede estar en moneda fiat (monedas tradicionales), en criptomonedas o en activos tokenizados, y con esa tarjeta se puede pagar un café, por ejemplo”, cuenta Mateo Bovio, VP Sales de la plataforma.
¿CÓMO EQUILIBRAR?
Invertir en criptomonedas no es sinónimo, necesariamente, de montaña rusa. Lo importante es saber cuánto riesgo asumir y cuánto destinar a este tipo de activos que en sí son volátiles. Hay quienes indican un 5%, otros un 10%. “El gran atractivo es que no están atadas a la coyuntura económica de un país”, aporta Hinz, de Binance. “Las perspectivas indican que el valor del Bitcoin continuará con una tendencia alcista. Para un inversor moderado, además de inversiones en Tether, también recomendamos Ether”, dice Rivas. Mendez, de Ripio, suma a Bitcoin Ether y las stablecoins como USDC o DAI como opción más conservadora: “Fueron el activo más demandado después de Bitcoin en nuestra plataforma”.
“Hay que interiorizarse de los proyectos de finanzas descentralizadas, que generan nuevos productos de inversión rentables a partir de proyectos financiados por tokens que se lanzan al mercado y pueden multiplicar su valor en poco tiempo”, dice José Trajtenberg, CEO de Xcapit, una plataforma que opera a través de algoritmos basados en inteligencia artificial.