DEL LADO FASHION DE LA VIDA
La agencia Marce García, homónimo de su directora, es en Argentina una embajadora de las marcas de lujo del mundo.
Desde hace dos décadas Marcela García traza los caminos de la consultoría para marcas de moda, belleza y lifestyle. Es por ello que las etiquetas internacionales más exclusivas le confían su comunicación. Con sede en su Buenos Aires natal, su firma opera en Nueva York asociada a GRB Communications desde 2008, está en Chile desde 2011, y gestiona contactos en América Latina, Europa y Asia.
¿Cómo se transformó la comunicación en los últimos años?
Definitivamente, en el manejo de la información. No importa el segmento. Antes el público informado correspondía a los segmentos premium y de lujo. Hoy ya nadie desconoce las cualidades de un producto o un servicio a la hora de decidir la compra. Esto hizo que la comunicación en general deba ser más meticulosa, cuidada y precisa, características que algunos años atrás eran exclusivas de la comunicación de marcas de lujo.
¿Cómo modificó la pandemia el paradigma de la comunicación?
Creo que lo reacomodó, porque había cierta falta de registro por parte de las marcas para poder identificar por dónde iban sus audiencias. La pandemia dio espacio para que los públicos, aun en el universo digital, se ordenaran, definieran sus preferencias y pudieran ser identificados para generar propuestas a medida. Por otro lado, el print se ha redefinido como vehículo que sigue vigente para comunicar el sector de lujo y, según el caso, también para el sector premium.
¿Qué desafíos plantea específicamente el trabajo con marcas de lujo?
El mayor desafío es siempre ser el primero y sorprender sin estridencias. La contraparte es que los casos de éxito suelen ser replicados muy pronto, entonces el nuevo desafío es archivar y repensar, nunca repetir.