Relojes y autos: una dupla exitosa
Como patrocinador de carreras y pilotos, Rolex apoya al automovilismo desde 1930. Hoy convertida en auspiciante y reloj oficial de la Fórmula 1, la marca suiza también participa de eventos donde los autos clásicos son los protagonistas.
Los relojes y los coches de lujo son grandes objetos de deseo. Por eso, no extraña la asociación de Rolex con el automovilismo de primer nivel. La marca suiza apoya competencias y fomenta la evolución de este deporte de alto rendimiento desde 1930.
Todo comenzó cuando el piloto estrella de la época, sir Malcolm Campbell, estableció nueve récords de velocidad en tierra con un Rolex en su muñeca. En 1935, rebasó la barrera de las 300 millas por hora (483 km/h) al volante del Bluebird en Bonneville, Estados Unidos. Llevaba un Rolex durante las pruebas de alta velocidad, muchas de las cuales tuvieron lugar en Daytona Beach, un epicentro de récords de velocidad en tierra conocido como la “cuna de la velocidad”.
Desde ese momento, la compañía buscó distintas maneras de unirse al mundo de los motores. Hoy su apoyo se extiende a los eventos internacionales más exitosos como la Rolex 24 de Daytona, en Florida, Estados Unidos; las 24 Horas de Le Mans, Francia; y el Campeonato Mundial de Resistencia de la FIA. Su punto más alto llegó en 2013, cuando se convirtió en Patrocinador Mundial y Reloj Oficial de la Fórmula 1 –la asociación marca la culminación de la historia de estrechos vínculos entre la marca y el automovilismo, la velocidad y la tecnología punta–. Rolex colabora con la Formula 1 en cada era del cambio, en las que equipos y pilotos se sirven de una tecnología innovadora y sostenible para proporcionar a los espectadores de este deporte la experiencia definitiva en carreras automovilísticas.
AL VOLANTE
Como parte de su compromiso con el automovilismo, Rolex también se ocupa de destacar a quienes están detrás del volante. Varios de los pilotos más importantes del mundo son Testimoniales de Rolex.
Hay célebres nombres de todas las épocas. El escocés sir Jackie Stewart, leyenda de la Fórmula 1, es Testimonial desde 1968; en 2010 se sumó el danés Tom Kristensen, uno de los pilotos de resistencia que más éxitos cosechó, con nueve victorias en las 24 Horas de Le Mans; hace cuatro años se volvió Testimonial Rolex el australiano Mark Webber, vencedor de múltiples Grandes Premios de Fórmula 1 y del Campeonato Mundial de Resistencia de la FIA en 2015; y este año se dio el último ingreso: Jenson Button, inglés, campeón del mundo de Fórmula 1 en 2009.
HOMENAJE A LOS CLÁSICOS
A lo largo de los años, Rolex demostró su pasión por el automovilismo. No solo en los certámenes más actuales, sino también en eventos que celebran la belleza de los coches históricos y sus rendimientos inoxidables, como Pebble Beach Concours d'elegance, The Quail, A Motorsports Gathering y Rolex Monterey Motorsports Reunion.
También forma parte de ese listado el icónico Goodwood Revival. Se trata del certamen con la mayor concentración de autos de carrera anteriores a 1966. En su 24a edición, realizada en septiembre pasado, evocó la era dorada del automovilismo.
Más de 150.000 entusiastas de los coches vintage, coleccionistas y expertos se reunieron para celebrar el legado, glamour y potencia de las carreras de los 40, 50 y 60. Quienes asistieron al autódromo Goodwood Motor Circuit, en Sussex, Inglaterra, se sumergieron en un viaje en el tiempo. Hubo estilo dentro y fuera de la pista. Porque el pasado se rememora no solo a través de los vehículos, sino también desde la ambientación y los atuendos de los participantes.
“Cada año, Revival mejora y atrae a más personas que vienen a ver estos preciados autos. Rolex es una parte muy importante del evento, con su aporte de calidad, atención en los detalles e integridad. Goodwood siempre me trae buenos recuerdos, ya que la visité por primera vez cuando tenía solo 14 años, y desde entonces he pasado muchos años en esta pista histórica, donde de hecho sigo siendo el poseedor del récord desde 1966”, aseguró sir Jackie Stewart, el histórico Testimonial Rolex, quien resultó tres veces campeón mundial de Fórmula 1.
Queda claro que relojes y autos son dos mundos que se atraen mutuamente al compartir su obsesión por la ingeniería mecánica, la precisión y los tiempos récord. Ya sea con la vista puesta en el pasado, el presente o el futuro, Rolex busca fomentar el automovilismo de primer nivel.