Un precursor alemán en su clase deportiva
El carismático deportivo se destaca por prestaciones y comportamiento. Seduce con su silueta convertible. Cómodo en ruta y también en la ciudad.
El Mercedes Benz SLC 43 AMG se destaca por prestaciones y comportamiento. Seduce con su silueta con vertible. Cómodo en ruta y también en la ciudad.
La marca alemana presentó la tercera generación de su carismático deportivo que hace poco más de un año cambió su denominación de SLK a SLC. Ahora, este roadster se ofrece en la Argentina únicamente en su variante más exclusiva AMG; que lo hace único en su especie por prestaciones y comportamiento.
CAUTIVANTE. El Mercedes Benz SLC 43 AMG tiene un diseño moderno, pero a la vez con algunos detalles
de sus antepasados más notables. Tiene nuevos paragolpes y tomas de aire de mayor tamaño. Su carrocería también es llamativa, sobre todo por la generosa trompa, las salidas de los escapes y las potentosas llantas de 18 pulgadas que dejan a la vista el detalle deportivo de las pinzas de freno. Aunque sus dimensiones son compactas (4,14 metros de largo), con el techo (de cristal panorámico tonalizado) cerrado adquiere un atractivo especial. En tan sólo 20 segundos el techo se abre, y esto se puede realizar en movimiento hasta los 40 km/h.
Puertas adentro deja en evidencia que no se trata de un producto completamente nuevo, ya que luce el mismo diseño que un SLK de hace seis años, sobre todo por los comandos de ventilación con esas ruedas que llevan números y varias teclas que dejan a la vista el paso de los años. La pantalla tampoco posee sistema touch; a cambio, hay que recurrir a la clásica rueda y el mouse.
Pese a que el interior no sea de última generación, ofrece dos butacas –con regulación eléctrica- muy confortables. La posición de manejo es baja, pero con una pedalera profunda y un volante que cae muy bien y con doble regulación. La presencia de cuero y de algunos apliques metálicos dejan a la vista una destacada calidad de materiales y terminación.
BITURBO. Aunque este SLC 43 no es un AMG de pura cepa como lo era su predecesor, este propulsor V6 biturbo es una verdadera maravilla, ya que genera mucha satisfacción para quienes aprecian y disfrutan manejar autos de altas prestaciones.
El motor V6 con dos turbos desarrolla una potencia de 367 CV y un torque de 53 kgm., suficiente para mover al SLC con mucho brío. Hace 0 a 100 km/h en 5,2 segundos. La velocidad máxima alcanzada fue de 253,7 km/h. En cuanto al consu
mo, es muy razonable ya que promedia poco más de 10 kilómetros por litro entre ruta y ciudad. Aquí es donde la caja de nueve marchas saca una gran ventaja, puesto que en las velocidades crucero de ruta, el motor gira a muy pocas vueltas.
La respuesta y el sonido son contundentes, sobre todo cuando se elije el modo de conducción Sport +. El ronquido es bastante deportivo, sube de vueltas con ganas y ofrece mucha fuerza a casi cualquier régimen. Como es habitual en los motores turboalimentados de nueva generación, este V6 genera algunas contra explosiones cuando se realiza alguna desaceleración o se cambia a una marcha superior en regímenes medios y altos.
DINáMICO. Este Mercedes Benz es un auto con el que se puede circular con cierta cuota de confort sin que nos canse en el día a día por las calles irregulares de la ciudad. En la ruta es firme y se disfruta, aunque la dirección puede llegar a resultarnos un poco liviana.
El nivel de seguridad está muy bien cubierto con airbags frontales, laterales y de cabeza; luces de led con excelente poder, sistema de monitoreo de cansancio del conductor y una carrocería muy reforzada en toda su estructura. Pero no es un auto para encarar un viaje tranquilo por el extenso territorio nacional, ya que no cuenta con neumático de auxilio, y a cambio ofrece un kit de reparación para salir del apuro en caso de pinchadura. El precio de lista tampoco es el más accesible: se ofrece por u$s 127.500 y no lo acompaña una garantía acorde a su valor y calidad, ya que dos años es poco tiempo para un modelo tan costo y exclusivo.
Este SLC 43 AMG genera mucha satisfacción para quienes aprecian y disfrutan manejar autos de altas prestaciones.