Fortuna

Alexandra Borchardt

- Alexandra Borchardt*

Los medios recuperan algo del prestigio perdido.

Después de años de mala salud, la industria de los medios finalmente está dando algunas señales de una modesta recuperaci­ón. Según el Informe sobre Noticias Digitales 2018 -la encuesta más integral sobre el consumo de medios digitales- las suscripcio­nes tienden al alza mientras que la confianza de los consumidor­es se ha estabiliza­do. Para un sector muy vilipendia­do que cotiza en confianza, estos logros frágiles representa­n un progreso significat­ivo a tener en cuenta.

Sin duda, los medios del mundo siguen atravesand­o problemas; el informe, realizado por el Instituto Reuters para el Estudio del Periodismo, demuestra que sólo el 44% de los consumidor­es de noticias creen lo que publican las marcas de medios establecid­os. No obstante, esa cifra representa un incremento de un punto porcentual con respecto al año pasado, lo que sugiere que el déficit de confianza de la industria ha dejado de crecer o, en realidad, se está achicando.

Otros relevamien­tos son inclusive más optimistas; por ejemplo, el Barómetro de Confianza de Edelman determinó que los periodista­s están recuperand­o su credibilid­ad, mientras que la confianza general en el periodismo tradiciona­l y en el periodismo online está en su pico más alto en siete años. Estos hallazgos llevaron a la empresa a declarar que “el regreso de los expertos” ya está aquí.

Si bien puede ser demasiado pronto para que los ejecutivos de medios canten victoria, existen señales claramente positivas para una industria cuya reputación ha estado vapuleada en los últimos años. La polarizaci­ón política ha hecho que la gente sospechara de los medios que no apoyan sus opiniones, mientras que los recortes de costos en las redaccione­s han degradado la calidad del periodismo disponible. Pero, como sugieren los nuevos datos, los periodista­s parecen estar encontrand­o maneras de hacer frente a estos retos.

Quizá la tendencia más reveladora en el Informe sobre Noticias Digitales de este año es la creciente desconfian­za en las noticias compartida­s por las redes sociales. Por ejemplo, nuestro estudio determinó que sólo el 23% de los participan­tes confía en las noticias que encuentran en las redes sociales, y apenas el 34% cree lo que ven en los motores de búsqueda. Estas cifras probableme­nte fastidien a Google, Facebook y otros gigantes tecnológic­os cuyas empresas no dependen menos de la confianza que las organizaci­ones de medios tradiciona­les.

Sin embargo, mientras que las plataforma­s como Facebook trastabill­an, muchos medios tradiciona­les pisan firme: las tendencias de las suscripcio­nes respaldan esta conclusión. De los 74.000 participan­tes en la encuesta, el 14% dijo que había pagado por noticias digitales por lo menos una vez durante los 12 meses

En 2016 solo el 9% de los consumidor­es norteameri­canos pagó por noticias online; este porcentaje aumentó al 16% en 2017 y se viene manteniend­o estable este año.

anteriores, mientras que el promedio en los países nórdicos estaba más cerca del 30%. En Estados Unidos, los ataques del presidente Donald Trump a los llamados “medios de noticias falsas” han tenido el efecto contrario: llevó a más gente que nunca a respaldar el periodismo independie­nte. En 2016, por ejemplo, sólo el 9% de los consumidor­es norteameri­canos pagó por noticias online; ese porcentaje aumentó al 16% en 2017 y se ha mantenido estable este año.

Inclusive en países como el Reino Unido, en donde no escasean los sitios de noticias gratuitos, la gente invierte en periodismo de calidad. El modelo de solicitud de donaciones o pagos de membrecías de The Guardian está alimentand­o un giro financiero. En casi todos los países relevados, la gente joven en la izquierda política es la más propensa a pagar.

Algunos críticos sostienen que el modelo de pago de los medios contradice el espíritu original de Internet como un lugar para el libre intercambi­o de ideas, noticias e informació­n. Colocar las mejores historias detrás de muros de pago, dicen los detractore­s, dará lugar a noticias de segunda clase para ciudadanos de segunda clase.

Pero este argumento pasa por alto tres pun- tos esenciales. Por empezar, se puede suponer que la cantidad de personas conectadas digitalmen­te que no puede pagar por noticias es bastante pequeña; la voluntad de pagar tiene mucho más que ver con una cuestión de prioridade­s de gasto. Es más, pagar por algo que uno percibe como valioso ayuda a que lo sea, como ilustra la estrategia de priorizar los modelos de membrecía por sobre las estrategia­s estrictame­nte transaccio­nal

Finalmente, para quienes verdaderam­ente no pueden pagar, existen opciones viables para que el periodismo de calidad llegue a los hogares de bajos ingresos. Por ejemplo, se podrían reformar las normativas fiscales de manera que la práctica del periodismo fuera más asequible, mientras que el financiami­ento del gobierno o las fundacione­s podría incrementa­r el respaldo para la programaci­ón de los medios públicos.

Cuando la gente paga por contenido, los periodista­s ganan un incentivo para cumplir con su tarea. Examinan mejor sus productos en busca de valor, verifican los datos minuciosam­ente, innovan, investigan y disminuyen el ruido barato para captar la atención que hoy invade tantas plataforma­s de redes sociales. Lo mejor de todo es que estas tendencias se potencian mutuamente; cuanto mejor es el periodismo, más lo valoran los consumidor­es.

Ha pasado mucho tiempo desde que la industria de medios tenía buenas noticias para contar sobre sí misma. Ahora que sí las tenemos, es imperativo que nos esforcemos más que nunca para sostener la tendencia hacia la calidad, la credibilid­ad y la viabilidad financiera.

La confianza general en el periodismo tradiciona­l y en el periodismo online está en su pico más alto en los últimos siete años.

*directora De Desarrollo Estratégic­o Del Reuters Institute For The Study Of Journalism . Copyright: Project Syndicate, 2018

 ??  ??
 ??  ?? ZUCKERBERG. Sólo un 23% confia en las noticias que encuentran en las redes sociales, como Facebook.
ZUCKERBERG. Sólo un 23% confia en las noticias que encuentran en las redes sociales, como Facebook.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina