Las ventajas de producir en la Argentina
La compañía que nació en Gran Bretaña y hoy está en manos del grupo indio Eicher Motors comenzó a fabricar motos en el país de la mano del Grupo Simpa. Por qué lo hace en este contexto económico adverso y su optimismo para los próximos meses.
Los últimos meses no se han caracterizado por tener buenas noticias en el mundo de los negocios en nuestro país. Casi todas las semanas alguna compañía multinacional decide cerrar sus operaciones o colgarse el cartel de “en venta”. En un mundo fuertemente golpeado por la Pandemia, con un comercio internacional a la baja y fronteras aún cerradas se les suman las decisiones económicas locales que lejos están de fomentar las inversiones privadas y, además, generan restricciones a las importaciones.
A pesar de esta realidad siempre se puede encontrar, aunque a veces sea difícil, ejemplos de empresas que parecen ir en contramano y apuestan por la Argentina. Es el caso de Royal Enfield, la legendaria marca británica que hoy está en manos del grupo indio Eicher Motors y que luego de desembarcar en el país en marzo de 2018 decidió comenzar a fabricar localmente tres de sus modelos. Lo hace junto al Grupo Simpa, empresa de capitales Argentinos con más de 40 años de trayectoria y que en el país produce para otras marcas de moto, como KTM, y comercializa Vespa, Piaggio, Aprilia, entre otras. Simpa, hasta el momento, importaba y vendía las motos de Royal Enfield.
Fortuna habló con Mauricio Salazar, manager regional de Royal Enfield y con Martín Schwartz, director de la división de rodados del Grupo Simpa, sobre el comienzo de la producción nacional en este actual contexto. “Cuando se aproximaban las primarias presidenciales de 2019, nosotros llamamos a Royal Enfield y les dijimos que en el país había dos escenarios posibles: continuar con la apertura económica o una etapa de restricción a las importaciones y fomento de la industria local. Nosotros queríamos tener un plan para ambas realidades. Ellos to
maron muy bien nuestro análisis y la posibilidad de empezar a fabricar en nuestro país, sobre todo teniendo en cuenta que nunca lo habían hecho y que no tienen este formato en ninguna parte del mundo”, explica Schwartz, del Grupo Simpa.
Por su lado, Salazar dijo: “Antes de llegar al país hicimos un sondeo de qué compañías ya estaban en el sector y qué marcas estaban manejando. Queríamos una empresa que manejara marcas premium y el Grupo Simpa tiene varias. Decidimos empezar a trabajar con ellos y el resultado durante los primeros años fue muy bueno, con crecimiento a doble dígito año contra año. Los elegimos también porque ellos ya estaban ensamblando KTM en Argentina, por lo que tenían el know how de cómo producir. Cuando Simpa levanta la mano hace más de un año y nos plantean los dos escenarios, nosotros ya estábamos preparados internamente para tomar la decisión de ensamblar en otro país que no fuera la India. Quizá lo hubiésemos hecho en un tiempo, pero esto aceleró nuestra decisión y los tiempos. No fue un proceso fácil, porque es la primera vez en 119 años de la marca que desde la casa matriz le entregamos el permiso de fabricación a un tercero externo que, además está muy lejos de India y de Inglaterra”.
FORTUNA: ¿Cómo fue el inicio del proceso de producción en el contexto de Pandemia?
SCHWARTZ: Fue un inicio de producción particular porque no pudo viajar ningún técnico de Royal. En
La fabricación local del modelo Himalayan permitió que la moto bajara su precio de u$s 6.700 a u$s 5.000.