EL REBOTE DEPENDE DE LA VACUNACIóN
Decíamos el mes pasado que en la Argentina como en todo el mundo la recuperación de la economía depende de la rapidez y eficacia en la vacunación contra el COVID 19. Y que el Gobierno enfrentaba un mayúsculo desafío de gestión en dos tareas claves: la provisión de un número suficiente de dosis y la aceleración de una campaña de vacunación que venía muy lenta luego de un auspicioso comienzo.
En las últimas semanas la situación se ha agravado ya que no solo las vacunas siguen sin llegar en el número prometido en forma tan estentórea y la vacunación continúa escasa, sino que aparecieron los llamados vacunatorios VIP tanto en Nación como en numerosas gobernaciones y municipios.
Esas noticias, tan desagradables, han canalizado el malestar de tantos por el problema de fondo: el Gobierno no está funcionando bien en el plano sanitario. Pero, la situación puede ser controlada, según afirman los expertos. Hay todavía un margen de tiempo para encaminarla, aunque se acorta cada vez más frente a la amenaza cierta de que el invierno nos encuentre con la población de mayor riesgo desguarnecida.
En este plano, las expectativas sobre una recuperación de la economía se sostienen en datos ciertos. Por ejemplo, la caída estimada el año pasado fue del 10,2 por ciento, la mayor desde la gran crisis de 2002. Sin embargo, estuvo por debajo de lo que se preveía hacía apenas unos meses. Y lo mismo ocurrió en muchos otros países y también en otros rubros decisivos como, por ejemplo, en las exportaciones globales, tal como explica el experto Marcelo Elizondo en la sección Documentos.
En otras palabras: el rebote de la economía puede ser mayor al esperado siempre que la vacunación funcione bien. Pero, el mundo no esperará a ningún rezagado. Los países que no tengan una gestión eficiente en este tramo decisivo de la pandemia también se verán perjudicados en el plano económico.
Para una buena gestión habría que comenzar con acertar en los diagnósticos. La nota de tapa de Salvador Di Stéfano, uno de los consultores agropecuarios más prestigiosos, demuele una cantidad de mitos urbanos sobre el estratégico —y complejo— negocio de la carne bovina. Estos mitos serían apenas una anécdota si redujeran su espacio vital a las mesas del café; el problema es que impregnan el discurso de no pocos funcionarios oficiales.
Con esta nota, y con otras que vendrán, la intención de Fortuna es echar luz sobre negocios de los que el periodismo no se ocupa tanto como debiera y que forman parte de la columna vertebral de la economía nacional: el campo.
El rebote de la economía puede ser mayor al esperado siempre que la vacunación funcione bien. Pero, el mundo no esperará a ningún rezagado.