GQ Latinoamerica

HIJA DEL PODER

-

Florencia, la heredera de Cristina Kirchner —la expresiden­ta argentina— lucha contra un persistent­e asedio judicial, debatiéndo­se entre la brutal acusación que le atribuye haber sido parte de una asociación ilícita y una carrera detrás de cámara en el cine, aunque su vida parece su mejor película.

Cristina Fernández de Kir- chner, la expresiden­ta de la Argentina (hoy candi- data a la vicepresid­encia por el Frente de Todos), habla al país: “Mi hija

Florencia, producto de la persecució­n feroz a la que fue sometida, empe- zó a tener serios proble- mas de salud. El brutal estrés que sufrió devastó su cuerpo (…)”. En marzo pasado, Florencia fue in- vitada al Festival de Cine de La Habana para la presentaci­ón de la película El ca- mino de Santiago —de la que fue coguio- nista—, y aún no volvía al país.

Todavía se encuentra en La Habana, lugar al que viajó con permiso judicial; luego, pidió una prórroga de su estadía por encontrars­e bajo tratamient­o médi- co. Poco se sabe de la vida de Florencia en Cuba. Hasta ahora, que la tratan en el Centro de Investigac­iones Médico-qui- rúrgicas (CIMEQ), dependient­e del Minis- terio de Salud cubano. Desde allí, se emi- tió un certificad­o médico que especifica los estragos padecidos: “Un trastorno de estrés postraumát­ico con síndrome pur- púrico en estudio, polineurop­atía sen- sitiva desmielini­zante, amenorrea, bajo peso corporal y un linfedema ligero (obs- trucción en el sistema linfático de las ex- tremidades) de los miembros inferiores; etiología no precisada”.

FLASH BACK (I)

Salto al 25 de mayo de 2003. Néstor, su padre, está asumiendo como presidente de la República Argentina, después de una crisis económica, que parecía termi- nal. Lo avala apenas un 22.2% de los vo- tos, pero pronto llegaría a una percepción positiva del 76% al término de su primer año de mandato gracias a políticas de contención social y un discurso y medidas de reivindica­ción constante de los dere- chos y la memoria de las víctimas de la represión ejercida desde el Estado, bajo la dictadura militar que diezmó a la nación entre 1976 y el 83. Algo cataliza en el ima- ginario colectivo, y el pueblo se enamora de otro líder personalis­ta que inaugura un nuevo ismo (el Kirchneris­mo).

Es el primer día de su gobierno; Flo- rencia va con su papá —que acaba de ju- rar su cargo en el Congreso— a conocer el despacho presidenci­al y se sienta en el sillón de Bernardino Rivadavia, pertene- ciente al primer presidente argentino. Su padre la abraza, la besa. Enseguida, salen a la antesala, donde ayudantes y asesores se muestran ansiosos e inquietos; es tar- de y los conminan a trasladars­e urgente- mente al Tedéum en la catedral, que con- duciría el actual Papa Francisco, entonces arzobispo de Buenos Aires, Jorge Bergo- glio. La madre y la suegra del presidente salieron hace un momento para ir más tranquilas y con más tiempo a la iglesia, que queda a 300 metros de allí. “Pá, tomá el bastón, que me voy a casa”, le dice su nena. “¿Te vas?”, incrédulo. “¿Con quién te vas?”. “Me lleva Cuca (por la señora que trabaja en el hogar)”, le responde la hija, con exhalación de tristeza. Tiene 13 años; ¡quiere vivir! Florencia quiere vivir.

ACUSADA

La periodista Laura Di Marco, autora del libro Cristina Kirchner, la verdadera his- toria, argumenta que “las familias acusan las consecuenc­ias del robo de sus padres, en enfermedad­es, en muertes, en adic- ciones”. “Si vos estudiás al Kirchneris­mo —sigue—, lo ves: lo que tiene Florencia es producto de lo que han hecho sus padres. Lo peor que se le puede achacar al Kir- chnerismo es haber convertido a sus hijos en delincuent­es”. A la espera de los estudios comple- mentarios y de la definición del trata- miento para su linfedema, Florencia aún no tiene fecha de regreso definida desde La Habana. Ella es hoy la mayor preocu- pación de Cristina, ya que está procesa- da en dos causas, ambas vinculadas a la actividad hotelera de sus padres durante el ejercicio de sus respectivo­s gobiernos, ambos sospechado­s de maniobras de reciclaje y blanqueo de dinero ilícito. Al embargarle una caja de seguridad y dos cuentas bancarias, un juez le detectó 5 millones de dólares y 50 mil pesos a su nombre. Al no ocupar un cargo público, su hija no posee fueros (como sí los tiene Cristina, que se desempeña actualmen- te como senadora) y, ante una eventual condena u orden de prisión preventiva, podría quedar detenida.

El argumento que la sostiene en Cuba, sin embargo, fue sellado por varios mé- dicos: “No puede caminar ni estar sen- tada por largos periodos. No debe viajar en avión”, expresaron los directivos del prestigios­o CIMEQ, en el que realiza el tratamient­o ambulatori­o, clínico y psi- quiátrico. “Es muy terrible para una joven que la acusen y señalen de haber ingre- sado a una asociación ilícita el mismo día en que murió su padre”, se expresó la

"ES TERRIBLE PARA UNA JOVEN QUE LA ACUSEN Y SEÑALEN DE HABER INGRESADO A UNA ASOCIACIÓN ILICITA EL MISMO DIA EN QUE MURIO SU PADRE", expreso la expresiden­ta de Argentina, Cristina Fernandez de Kirchner madre de Florencia, en un video que difundio al mundo a traves de sus redes sociales, intentando defender a toda costa el honor de su hija.

expresiden­ta, su madre, en un video que difundió al mundo a través de sus redes, intentando defender el honor de su hija.

FLASH BACK (II)

Esta vez, al 28 de octubre de 2007, Cristi- na es electa presidenta para suceder a su marido con el 43.9% de los votos. Así se coloca 22 puntos por encima de su con- trincante, Elisa Carrió, que representa a la centro-derecha, y hoy integra la coalición de gobierno de Mauricio Macri. Una clave de su triunfo está en su rotunda elección en la provincia de Buenos Aires, donde el electorado le agradece los programas in- tegradores, como la Asignación Universal por Hijo. Es la primera vez en la historia en que dos mujeres llegaron a la elección presidenci­al en el primero y segundo lu- gares en las preferenci­as. Su marido, Nés- tor, moriría antes de que ella terminara su mandato, el 27 de octubre de 2010.

Florencia crece; se va haciendo cono- cida su pasión por los fotologs, rincones de Internet que Cristina preferiría preser- var de las miradas de la prensa. Allí, hace pública su admiración por Nelson Man- dela y por Nicole Kidman, o posa vestida con remeras con corazones. “Es una chica posmoderna, ciudadana del siglo XXI”, la define su mamá. Pasan los años, y fruto de la relación de Florencia con Camilo Vaca Narvaja —hijo de uno de los mili- tantes de la agrupación Montoneros, que combatió en la clandestin­idad durante los años 70—, Florencia queda embarazada. Durante los últimos días del último año de la segunda presidenci­a de su madre, Florencia la hace abuela por segunda ocasión. Fue la noche del domingo 23 de agosto de 2015 cuando Helena se posó en brazos de Cristina, por vez primera.

CINEFILIA

Florencia renació creativame­nte esos meses iniciales en los que su madre ya no es la presidenta; empezó a expresarse, como guionista, por ejemplo, del filme El camino de Santiago (2018), dirigida por Tristán Bauer. Incluso el diario La Na- ción, opuesto al Kirchneris­mo, dijo a tra- vés de su crítico Diego Batlle: “Impecable acabado técnico a nivel imagen, sonido y edición. Los alcances humanos de la cinta probableme­nte conmoverán a todos (…)”.

 ??  ??
 ??  ?? Durante los mandatos presidenci­ales de sus padres, Florencia Kirchner formó parte de varios eventos oficiales, pero siempre prefirió mantenerse al margen y en segundo plano.
Durante los mandatos presidenci­ales de sus padres, Florencia Kirchner formó parte de varios eventos oficiales, pero siempre prefirió mantenerse al margen y en segundo plano.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina