LICENCIA PARA PROVOCAR
Los Rivera Destino han hecho de la comedia su Caballo de Troya para triunfar en el mundo de la música latinoamericana. “Es porque somos el resultado de nuestros tiempos”, aseguran los integrantes de este trío puertorriqueño, para quienes no hay límites a la hora de conjugar la libertad de expresión con el humor.
Grábate bien los dos apellidos. El primero, Rivera, es, quizás, el más común en Puerto Rico. Destino, el segundo, no existe. Ellos lo inventaron para bauti- zar a su pequeña familia cómico-mágico-musical. “Bolero, rock, sátira, bossa metal, trova polaca al- ternativa”, así se han etiquetado ellos mismos desde su irrupción con el tema “Vladimir Putin”, allá por 2014 —aunque, curiosamente, la canción en clave de rock-pop-reggae, en realidad habla de una falli- da visita a la playa y jamás menciona al mandatario ruso—. Pero no, mejor no tratemos de encasillarlos porque Antonio Sánchez, Carlos Figueroa y Fernando Tarrazo han llamado la atención de propios y extra- ños —esos que se escandalizan con sus letras satíri- cas que dicen cosas como “yo no soy más que una reacción de una eyaculación que soltaste un día”—, justo por apostar a la experimentación musical y a las líricas sin prejuicios. “Nuestra generación es sub- versiva, podemos mezclar todo tipo de música, está permitido utilizar chachachá, bolero, pasodoble y rock. Podríamos rapear, pero somos demasiado bo- hemios para eso”, nos comparte Fernando. “Recurri- mos al humor y a las letras directas. Ya no se usan las metáforas. Nos gusta ver las reacciones de la gente, cuando voltean y se preguntan qué dijimos”, remata. “Les encanta provocar, ¿verdad?”, les pregunto. “Más bien, nos gusta decir las cosas como son, hacer que la gente esté pendiente de la letra y que la música no sea sólo ruido de fondo”, declara Sánchez.
Son amigos desde la universidad y gracias a esa complicidad, han hecho de su comedia musical —en la que se percibe la sombra de los argentinos Les Luthiers— toda una declaración de principios con el sarcasmo como desahogo sobre los temas sociales y políticos de la actualidad, recurriendo con soltura a los ritmos latinos de ayer y hoy. “Esta generación de puertorriqueños tiene una nueva visión de lo que pasa en la isla. Desde que sacamos al gobernador que era de derecha proamericana, nos sentimos más latinoamericanos que nunca”, confiesa Carlos. “Los políticos en Puerto Rico la han cagado tanto, que la gente se identifica más con los artistas, aunque no vivan ahí”, continúa. Hace un par de años, cuando el huracán María afectó gravemente la vida cotidiana de la isla, parecía que el sueño de la entonces emer- gente agrupación se desvanecía con el viento, “pero después de que pasó todo el desastre, regresamos con una versión del éxito urbano ‘Te boté’, pero en bolero”, recuerda Antonio. En el tema original, par- ticipa Bad Bunny, quien, al escuchar el cover, que- dó prendado del estilo del joven grupo, a tal grado que los contactó y les propuso colaborar con ellos y grabar un nuevo tema titulado “Flor” (firmando con su verdadero nombre, Benito Martínez), que, segura- mente, estará incluido en el disco que preparan aho- ra. “El tipo tiene nuestra edad y de estar colaborando con J.LO y Will Smith, decidió hacer algo con noso- tros. Eso fue muy importante. Somos un conjunto de singles, pero ya es momento de tener un álbum”, revela Fernando.
En 1953, ‘El rey del mambo’, Dámaso Pérez Pra- do, fue expulsado de México –cuenta la leyenda, aunque no hay una versión oficial– por atreverse a adaptar el Himno Nacional a su estilo. “Para que nos expulsen a nosotros de algún país latinoamericano, tendríamos que hacer un mal chiste acerca de algo que no conocemos, quizás como el que provocó el atentado contra Charlie Hebdo en Francia”, aseguran. Pero tienen clara su postura sobre los límites de la comedia: “No los hay. Lo importante es saber cruzar la línea de forma inteligente, no hacerlo por hacerlo. El vehículo más óptimo para hablar de cosas difíciles es el humor, como hace Dave Chappelle, que puede abordar cualquier tema tabú en su rutina de stand up porque domina la información”, asevera Antonio. “Entonces, ¿se vale el humor en cualquier manifes- tación? ¿Qué opinan de lo que dijo Aleks Syntek en 2017?”, les cuestionó. “Es un personaje muy ‘querido’ en Puerto Rico. Y lo digo irónicamente porque él dijo algo en contra del reggaetón, que le preocupaba que sus hijas escucharan esas letras. Pero no, no es el re- ggaetón el que va a educar a las personas, eres tú. El género no tiene la culpa, no es música para analizar- se, sino para disfrutarse, y si se lo prohíbes a tus hijas, se van a ir a perrear a una discoteca con el primer boricua que les hable rapeado”, finaliza Antonio.