CÁNCER, EL CANGREJO
Los cancerianos son como niños de padres impredecibles e inconsecuentes. Estos niños compensan su falta de seguridad volviéndose muy cautos, aprensivos y codiciosos. Como su símbolo, el cangrejo, Cáncer también puede crearse un caparazón de cosas materiales para protegerse de lo que parece un mundo caprichoso e incierto. El punto débil de su cuerpo es su estómago. Tienen un sistema digestivo lento y pueden ser proclives a úlceras. También tienden a sufrir emocionalmente. Son propensos a depresiones y cambios de humor de golpe, pueden pasar de la alegría a la tristeza en cuestión de segundos y viceversa. No obstante, un aspecto positivo de esta extrema sensibilidad es que les permite entender rápidamente lo que necesitan o desean los demás. Son grandes y agudos observadores de cada movimiento y gesto de los otros, y buscan incansablemente señales de cambio o de problemas. Son extremadamente intuitivos.